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Bachelet pide a constituyentes de Chile escuchar ‘los anhelos de la población’

La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos y expresidenta de Chile Michelle Bachelet, asistió este jueves a una sesión de la Convención Constituyente de su país, a la que pidió «escuchar los anhelos de la población».

«Sería un grave error dejar de escuchar los anhelos de la población. Una buena Constitución es una que ayuda al buen funcionamiento del país», afirmó Bachelet, la primera mujer en gobernar Chile en dos ocasiones, de 2006 a 2010 y entre 2014 y 2018.

También resaltó la importancia de que el nuevo texto garantice la plurinacionalidad de los pueblos indígenas, que por primera vez están representado en este órgano a partir de 17 escaños reservados.

La alta comisionada abogó asimismo porque los cambios no se realicen de forma abrupta y haya participación ciudadana.

«La ciudadanía no sólo quiere elegir un candidato, sino que quiere tomar decisiones en el día a día», afirmó Bachelet.

No obstante, reconoció «no son discusiones fáciles ni intuitivas y recién comienzan a salir del círculo de los académicos» por lo que «se va a necesitar invertir mucha pedagogía hacia la ciudadanía para sumarla a la decisión», de cambiar o no el actual régimen de gobierno a uno semipresidencial o parlamentario.

Otro desafío, agregó, «es lograr un equilibrio para representar de la mejor manera posible los anhelos de los ciudadanos y a la vez dar gobernabilidad».

Bachelet llegó a Chile días antes del balotaje del domingo, en el que se impuso el joven diputado de izquierda Gabriel Boric, a quien ella le dio su público respaldo.

Otros expresidentes, como el socialista Ricardo Lagos (2000-2006), también visitaron la Convención, que se instaló el 4 de julio, para ofrecer su visión sobre el trabajo que se está realizando.

La redacción de una nueva Constitución para reemplazar a la heredada de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) fue aprobada en un plebiscito en octubre de 2020.

Esa consulta tuvo lugar tras un acuerdo alcanzado por todas las fuerzas políticas -salvo el Partido Comunista- para encauzar las protestas sociales -algunas muy violentas- que se sucedían en el país desde octubre de 2019.