Un camión con el cartel «OEA: a la mujer la define la biología, no la ideología» levantó el lunes una polémica en Perú, dos días antes del inicio de la asamblea anual del organismo en Lima, que abordará los derechos de las minorías sexuales.
El vehículo con el enorme cartel azul y letras blancas, con el escudo de la Organización de Estados Americanos (OEA), se estacionó frente al edificio del Congreso.
A lado del camión se manifestaron contra la «agenda progresista» de la OEA unas 20 personas, entre ellas el tercer vicepresidente del Parlamento peruano, el ultraconservador Alejandro Muñante.
La presencia del vehículo provocó la ira de otros legisladores, entre ellos Susel Paredes, lesbiana, quien afirmó que el cartel «transmite un mensaje de odio e intolerancia».
«Con los Derechos Humanos no se juega», tuiteó Paredes, quien aseguró que el camión «difundió un mensaje ofensivo» y utilizó «ilegalmente el logo de la OEA».
La legisladora centrista Flor Pablo, del Bloque por la Igualdad, exigió que el jefe del Parlamento, el derechista José Williams, «dé una explicación pública» por permitir el «uso de las instalaciones [del Congreso] para colocar mensajes discriminatorios, con logo» de la OEA.
Varios legisladores enviaron una carta a Williams para reclamar contra el camión, parte de una campaña de grupos religiosos conservadores.
Muñante, que integra un bloque parlamentario «en defensa de la vida y la familia», además convocó a una manifestación este jueves en una plaza de Lima en rechazo «a la agenda progresista de la OEA».
El lema de esta 52ª Asamblea General del foro, que tendrá lugar del miércoles al viernes, es «Juntos contra la desigualdad y la discriminación». Fue escogido por el gobierno izquierdista de Perú, como país anfitrión.
El Congreso peruano, controlado por la derecha opositora, estuvo en julio cerca de negar la autorización para la asamblea de la OEA pues el centro de convenciones contaría con un «baño neutro», no binario.
El pleito por el baño neutro arrancó cuando unos legisladores alegaron que eso significaría permitir sanitarios para transexuales durante la asamblea. El veto del Congreso se revirtió tras una invocación del canciller peruano, César Landa.
La discordia quedó zanjada en un acuerdo que dice: «El gobierno debe garantizar un acceso adecuado a las instalaciones sanitarias (…) debiendo proporcionar además de los baños comunes, baños individuales y al menos un baño neutro».
En julio, el secretario general de la OEA, Luis Almagro, expresó su deseo que la asamblea pudiese efectuarse en Lima, con el baño neutro.
«Agradecemos al Gobierno esfuerzos por albergar #AsambleaOEA 2022. Deseamos que AG ‘Juntos contra la desigualdad y la discriminación’, por + derechos para + gente pueda realizarse en #Lima», tuiteó entonces el responsable de la OEA.