El Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha anunciado este jueves nuevas sanciones contra Irán, que incluyen al ministro del Interior, Ahmed Vahidi, y la ministra de Comunicaciones, Eisa Zarepour, en represalia a las protestas que vive el país tras la muerte de la joven kurdo-iraní Mahsa Amini.
«Estados Unidos condena la continua represión violenta de las protestas por parte del Gobierno iraní tras la trágica muerte de Mahsa Amini, de 22 años, bajo la custodia de la llamada Policía de la Moralidad», ha señalado el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken.
Blinken ha explicado en un comunicado que las sanciones contra Teherán, que ha emprendido un camino «enérgico» contra «el derecho a la libertad de expresión y de reunión», incluso llegando a cortar internet, «demuestran que Estados Unidos apoya a los ciudadanos y a las mujeres de Irán que en este momento se están manifestando para asegurar sus derechos básicos».
Por su parte, el subsecretario del Tesoro, Brian Nelson, ha explicado que estos derechos «son vitales para garantizar la libertad y la dignidad individual», por lo que Washington «condena el cierre de internet», así como la «continua represión violenta de las protestas pacíficas».
El ministro del Interior de Irán, Ahmed Vahidi, mantiene la supervisión de las fuerzas de seguridad desplegadas para sofocar las protestas, que «han utilizado la fuerza letal contra los manifestantes en múltiples ocasiones», según un comunicado del Tesoro.
«Las acciones han resultado en miles de muertos, incluidos decenas de heridos en las recientes manifestaciones contra la Policía de la Moralidad. En el pasado, Vahidi ha advertido a las mujeres iraníes que las fuerzas de seguridad del gobierno penalizarán a aquellas que ‘infrinjan las reglas’ en referencia al cumplimiento del hiyab», ha expresado.
Por ello, Washington impone sanciones contra Vadihi por «ser responsable o cómplice de ordenar, controlar o dirigir» a «abusos graves» contra los Derechos Humanos desde 2009. Por otro lado, también ha recordado que supervisó el bombardeo del edificio de la Asociación Mutual Israelita Argentina en la que murieron 85 personas.
Por su parte, la ministra de Comunicaciones, Eisa Zarepur, es «responsable del vergonzoso intento del Gobierno iraní de bloquear el acceso a Internet de millones de iraníes con la esperanza de frenar las protestas».
Debido a ello, Zarepur ha sido sancionada por Estados Unidos por «haber participado en la censura u otras actividades» a partir de 2009, resultando en la «prohibición, limitación o sanción de la libertad de expresión o de reunión de los ciudadanos de Irán».
Esto incluye también a los medios impresos, así como a la «manipulación o apoyo» a entidades de propiedad o controladas por las autoridades iraníes para «bloquear o restringir» señales internacionales.
Las sanciones también se dirigen contra altos cargos de las fuerzas de seguridad iraníes, entre los que se encuentran Hosein Sajedinia, comandante adjunto de operaciones; Yadolá Javani, comandante político adjunto de la Guardia Revolucionaria; Hosein Nejat, comandante de la Guardia Revolucionaria y Hosein Rahimi, jefe de policía de Irán en Teherán.