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Turquía detiene a una mujer siria y acusa al PKK kurdo de atentado en Estambul

Una mujer siria fue acusada de haber colocado la bomba del atentado que causó la víspera seis muertos en Estambul. Foto: el Periódico, España.

Una mujer siria fue acusada de haber colocado la bomba del atentado que causó la víspera seis muertos en Estambul. Foto: el Periódico, España.

Turquía acusó este lunes a una mujer de nacionalidad siria de haber colocado la bomba del atentado que causó la víspera seis muertos en Estambul. Según la policía, la mujer actuó bajo orden del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK).

Imágenes de la policía difundidas en la prensa turca mostraban a una mujer con suéter violeta detenida en un apartamento.

«La persona que puso la bomba fue detenida», había declarado poco antes el ministro turco del Interior, Suleyman Soylu. «Según nuestros hallazgos, la organización terrorista PKK es responsable» del atentado, aseguró.

La mujer, presentada como Alham Albashir, habría entrado clandestinamente a Turquía pasando por Afrin, localidad del nordeste de Siria controlada por soldados turcos y sirios. La policía afirmó que había recibido órdenes en la ciudad de Kobane, también en el nordeste de Siria y bajo control de movimientos kurdos, aliados del PKK.

Según el ministro, fueron detenidos 46 sospechosos, algunos de ellos en el mismo lugar que la mujer.

El artefacto explosivo estaba compuesto por «TNT de fuerte potencia», precisó la policía. La institución policiaca afirmó haber encontrado en el apartamento una importante suma de dinero en euros y piezas de oro en una bolsa, así como una pistola y cartuchos.

El atentado, cometido a media tarde del domingo en la arteria comercial de Istiklal, no fue reivindicado. Causó seis muertos y 81 heridos, una treintena de los cuales seguían hospitalizados este lunes.

Entre los fallecidos, todos turcos, figuran una niña de 9 años que murió con su padre, y una adolescente de 15, que pereció con su madre.

«En un banco»

Desde el domingo por la noche, el presidente Recep Tayyip Erdogan y su vicepresidente Fuat Oktay designaron «una mujer» como la responsable del atentado.

Según el ministro de Justicia, Bekir Bozdag, una «mujer se sentó en un banco durante 40 o 45 minutos y, uno o dos minutos después, hubo una explosión».

La prensa turca difundió una imagen de una cámara de vigilancia en la avenida Istiklal en la que se ve a una joven con pantalón de camuflaje y un velo negro que corre entre la multitud. La mujer siria fue designada como la encargada de colocar la bomba.

El ministro del Interior acusó a las fuerzas kurdas del YPG, las Unidades de Protección Popular, que controlan la mayor parte del nordeste de Siria, de ser las responsables del ataque.

«Creemos que la orden del ataque fue dada en Kobane», aseguró.

Para Ankara, las YPG y el PKK son grupos «terroristas».

Este lunes, Turquía rechazó las condolencias de Estados Unidos por el atentado, alegando que Washington «apoya a los terroristas» de Kobane.

La ciudad de Kobane adquirió notoriedad por la batalla de 2015 que permitió a las fuerzas kurdas apoyadas por Estados Unidos repeler al grupo yihadista Estado Islámico (EI).

La frecuentada avenida Istiklal, en parte cerrada el domingo, fue reabierta el lunes por la mañana. Pero todos los bancos fueron retirados, según constató la AFP.

Una alfombra roja cubría el lugar de la explosión y los transeúntes depositaban claveles rojos.

También puede leer: Al menos seis muertos en un atentado en el centro de Estambul en Turquía

PKK y OTAN

El PKK es considerado una organización terrorista por Turquía, Estados Unidos y la Unión Europea. El grupo mantiene una lucha armada contra el gobierno turco desde los años 1980.

Ankara lo ha señalado en el pasado como responsable de sangrientos ataques en territorio turco.

En diciembre de 2016, un doble atentado cerca del estadio de fútbol Besiktas, en Estambul, causó 47 muertos (39 de ellos policías) y 160 heridos. Este espacio fue reivindicado por los Halcones de la Libertad del Kurdistán (TAK), grupo radical kurdo cercano al PKK.

El PKK está en el centro del pulso entre Suecia y Turquía, que bloquea desde mayo su entrada a la OTAN, por acusarla de ser demasiado tolerante con el grupo.

Ankara pide la extradición de varios de sus miembros. Se tiene un principio de acuerdo firmado en junio con Suecia y Finlandia, otro país nórdico que quiere ingresar en la Alianza Atlántica.

Tras la visita a Ankara del primer ministro sueco, Ulf Kristersson, la semana pasada, el Parlamento sueco se dispone a cambiar la Constitución para endurecer su legislación antiterrorista. El PKK es a menudo objeto de operaciones militares turcas contra sus bases en el norte de Irak y Siria.