La Administración Biden tiene previsto responsabilizar de forma directa al primer ministro encargado de Israel, Benjamin Netanyahu, por las acciones de los miembros más extremos de su futuro Gobierno de coalición, en el que se incluyen partidos ultraderechistas.
Dos funcionarios estadounidenses, cuya identidad no ha trascendido, han asegurado al diario Político que Netanyahu «puede esperar mucho más que comunicados de prensa redactados con dureza por parte del Departamento de Estado» ante las posibles acciones de sus socios de Gobierno, especialmente en lo que respecta a Gaza y Cisjordania.
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Estas declaraciones dejan la puerta abierta a otro tipo de acciones por parte de la Administración Biden, aunque por el momento se desconoce qué tipo de medidas tiene preparado Washington para responsabilizar a Netanyahu de la entrada en el Gobierno del ultraderechista Otzma Yehudi, el ultraortodoxo Shas y el ultranacionalista Sionismo Religioso.
Hace escasos días, Netanyahu cargó contra otro diario estadounidense,’The New York Times’, por abogar por «socavar» al próximo Ejecutivo en un editorial en el que el periódico afirmaba que la coalición podría suponer una amenaza para la democracia en el país.
El bloque encabezado por el Likud, que cuenta con el apoyo de varios partidos ultraortodoxos y ultraderechistas, tiene 64 de los 120 escaños de la Knesset, por lo que Netanyahu tiene el camino abierto para volver al cargo menos de dos años después de su derrota electoral en 2021.