EEUU anunció el jueves sanciones a personas y empresas a las que acusó de ser cómplices de la guerra de Rusia contra Ucrania, dirigidas a entidades en Turquía, China y los Emiratos Árabes Unidos en un intento por alterar las cadenas de suministro de Moscú.
Esto se produce cuando Rusia trasladó la producción de tecnología, equipos y otros bienes que necesita para su ejército, dependiendo de proveedores de otros países para adquirir estos artículos, dijo el Departamento del Tesoro de EEUU.
«Rusia depende de individuos y entidades de terceros países dispuestos a reabastecer su ejército y perpetuar su atroz guerra contra Ucrania y no dudaremos en exigirles responsabilidades», dijo la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, en un comunicado.
EEUU ya había sancionado a China, pero ahora apunta a Turquía.
Rusia invadió la vecina Ucrania en febrero de 2022, provocando el mayor conflicto en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
El Tesoro añadió el jueves que Rusia ha estado explotando «relaciones económicas que de otro modo serían legítimas» con otros países. Y agregó que entidades en China, Turquía y los Emiratos Árabes Unidos han estado enviando a Rusia bienes de doble uso, como componentes críticos de los que depende Moscú para sus sistemas de armas.
Las últimas sanciones implican 130 nuevos objetivos.
Además del Tesoro, el Departamento de Estado estadounidense también está emitiendo cerca de 100 sanciones dirigidas a áreas como la futura producción e ingresos energéticos de Rusia, el sector metalúrgico y minero, así como las adquisiciones de defensa.
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