El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, y su par francés, Emmanuel Macron, lanzaron el martes un plan que busca recaudar más de $us 1.000 MM para invertir en proyectos de economía sostenible en la Amazonía de Brasil y Guayana Francesa.
El anuncio, que ocurre al inicio de una visita de Estado de Macron a Brasil, forma parte de una hoja de ruta internacional que ambos mandatarios impulsarán de cara a la COP30 del clima en la ciudad amazónica de Belém, en el norte de Brasil, en 2025.
El plan pretende recaudar «1.000 millones de euros de inversión pública y privada durante los próximos cuatro años» ($us1.080 MM), según el documento de la Hoja de Ruta publicado por la presidencia francesa.
Ambos mandatarios buscan «defender juntos, en el marco de la presidencia brasileña del G20, un gran plan mundial de inversiones, públicas y privadas, en bioeconomía».
Ese plan debe conjugar la «conservación y la gestión sostenible de los bosques» con la «valorización económica» de sus territorios; poniendo a los «pueblos indígenas y las comunidades locales en el centro de la toma de decisiones», dice el documento.
Además, la hoja de ruta propone el desarrollo de un «mercado de carbono que remunere a los países selváticos que inviertan en la recuperación de los sumideros naturales», los ecosistemas que capturan grandes volúmenes de emisiones de carbono.
«Apoyaremos a los pueblos indígenas y las comunidades locales de la Amazonía, que tienen un papel esencial en la protección de la biodiversidad a través de sus conocimientos tradicionales y prácticas de gestión de las selvas», subraya el documento.
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Lula y Macron
En un gesto simbólico del deseo común, Macron inició su visita en Belém, donde fue recibido por Lula.
Tras encontrarse en esa ciudad, ambos presidentes abordaron una pequeña embarcación que los llevó a la isla de Combu. En el lugar visitaron una microempresa de producción de cacao; con el objetivo de demostrar que el desarrollo económico y la protección del medio ambiente pueden ir de la mano.
El miércoles, el presidente francés se dirigirá a la base naval de Itaguaí, cerca de Rio, y posteriormente viajará a Sao Paulo y Brasilia.