El presidente Evo Morales afirmó ayer que «es su obligación investigar» si existe relación entre la Fundación española Iberoamérica-Europa (FIE) y la financiación de un golpe de Estado en su país el 2008.
Sin embargo, Morales no aportó pruebas y se limitó en una rueda de prensa a presentar varias informaciones de medios de comunicación que señalaban que en España también se investigaba a algunas fundaciones que podrían estar implicadas en intentonas golpistas y separatistas en Bolivia.
«Acá no vengo a ofender a nadie, pero mi obligación es investigar. No creo que ello afecte las relaciones con el gobierno de (José Luis Rodríguez) Zapatero», respondió sobre la polémica que sus declaraciones sobre este tema han provocado.
Insistió en que leyó esos informes de prensa en los que se sugería que el conservador Partido Popular (PP) mediante una fundación, a su vez financiada por la Comunidad de Madrid, supuestamente apoyó el intento de golpe en su país.
Zapatero salió en defensa del principal partido de la oposición y dijo que «siempre he pensado que el PP es un partido que respeta y promueve los valores democráticos».
Morales reiteró que «mi obligación es defender la unidad de mi país» y citó, leyendo recortes de medios de comunicación, que hubo distintos giros de cheques a organizaciones empresariales bolivianas.