Demanda de tierra gesta fricción entre campesinos e indígenas
Propuesta. La CSUTCB elabora y socializa un proyecto de ley para revisar las TCO
Con el argumento de que tienen iguales derechos que los indígenas, los campesinos decidieron promover un nuevo proceso de distribución de tierras que afectaría los territorios donde hoy habitan los aborígenes, lo que amenaza con una nueva fricción entre ambos sectores.
Según revelaron a La Razón dirigentes campesinos que pidieron reserva para evitar represalias de su sector, la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB) y el Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (Conamaq) elaboran un proyecto de ley de tierras en el que exigen al Estado la revisión de las Tierras Comunitarias de Origen (TCO) para garantizar una distribución equitativa.
Sin embargo, el movimiento indígena del oriente reclama al Gobierno el respeto de las TCO y justamente éste es uno de los motivos por los que iniciaron la marcha que ahora se encuentra paralizada en la población de Ascensión de Guarayos a la espera de que el Gobierno responda a los planteamientos indígenas.
Pero los campesinos están decididos a avanzar con su proyecto, que en los próximos días será puesto en consideración de la Confederación Nacional de Mujeres Campesinas Indígenas Originarias Bartolina Sisa, según anunciaron las fuentes.
Fricción. Justamente la marcha indígena provocó señales de distanciamiento entre estos dos sectores pilares del Gobierno.
El martes, el senador y dirigente cocalero Julio Salazar anunció que las seis federaciones cocaleras del Trópico de Cochabamba no permitirán que los indígenas pasen por esa región, porque consideran que este movimiento es una traición al proceso de cambio. «Son unos conspiradores», coincidió el máximo dirigente de la CSUTCB, Roberto Coraite.
Campesinos, colonizadores, cocaleros y mujeres campesinas cerraron filas en contra de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB) que promueve la marcha indígena.
«Nosotros pensamos que la tierra debe ser distribuida equitativamente; en cambio, ellos (CIDOB) piensan que las tierras fiscales deben ser TCO. La marcha nos puede llevar a un enfrentamiento, porque al llegar a Santa Cruz se puede masificar y sus demandas se pueden radicalizar. Nosotros defendemos el proceso de cambio y ellos defienden intereses ajenos», aseguró uno de los dirigentes campesinos.
La ejecutiva de las mujeres campesinas, Leonilda Zurita, anunció que su organización declaró «estado de emergencia» debido a las acciones de los indígenas de tierras bajas.
«No puede ser que las tierras fiscales se queden en las manos de los indígenas, también estamos nosotros como mujeres campesinas. La tierra hay que repartirla equitativamente para todos, no es posible que una organización pueda acaparar todas las tierras. Se puede sanear más de cuatro millones de hectáreas para los indígenas y ahora quieren más, y ¿nosotros dónde estamos?», preguntó Zurita.
El 2007 la CIDOB, junto a la CSUTCB, las mujeres «Bartolina Sisa», Conamaq y las Comunidades Interculturales conformaron un Pacto de Unidad para promover un nuevo modelo de Estado a través de la reforma constitucional. Ahora, la CIDOB se desmarcó del acuerdo y realiza la marcha con «apoyo moral» del Conamaq y el rechazo de los otros miembros.
Sobre el tema, el senador del MAS y ex líder campesino, Isaac Ávalos, aseguró que el Pacto de Unidad con la CIDOB sigue vigente, pero «ellos quieren que la tierra que se recupere vía saneamiento sea distribuida únicamente entre ellos, ¿los campesinos en qué quedamos? Nosotros también tenemos derecho a la tierra, igual que ellos».
Para el dirigente indígena de la Coordinadora de Pueblos Étnicos de Santa Cruz (CPES), Lázaro Zaco, los reclamos del sector campesino son «injustos» y pueden conllevar a futuros conflictos sociales.
«Nuestra demanda es justa y está dentro del marco de la Constitución. En cambio la posición de los campesinos es egoísta y puede traer conflictos sociales si es que se logra ejecutar ese plan», indicó.
PROYECTO. El otro dirigente de la CSUTCB que habló con este medio informó que su organización se encuentra en proceso de elaboración de un proyecto de ley de tierras.
«Nosotros no queremos anular las TCO, lo que planteamos es un estudio especial que diga cuántos indígenas tenemos en el oriente, si necesitan tierras hay que darles y si justifica o no justifica la cantidad de tierras que tienen. Nuestros compañeros campesinos están muriendo de hambre. Con esto no estamos en contra de nuestros hermanos indígenas, pero nosotros también tenemos derechos igual que ellos», afirmó el sindicalista.
Las TCO son una modalidad de propiedad de la tierra donde se garantiza el uso y aprovechamiento sostenible a un pueblo indígena, que tiene la potestad de administrar los recursos naturales en el marco de sus usos y costumbres.
Para el líder de la CIDOB, Adolfo Chávez, la propuesta de los campesinos es una posición «unilateral» que puede traer conflictos. «El tema podría generar fricciones, estoy seguro de que habría un desorden total. La propuesta de los campesinos no es coherente», advirtió el dirigente indígena.
Datos de las TCO en Bolivia
Según datos del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) existen 147 Tierras Comunitarias de Origen (TCO) tituladas hasta septiembre del 2009. Para lograr el saneamiento de esas tierras, los indígenas deben demostrar que viven y se desarrollan en ese territorio cotidianamente. Hoy existen 31 millones de hectáreas demandadas por los indígenas. La superficie total de las TCO alcanza a 97,9 millones de hectáreas. Bolivia cuenta con 11 millones de hectáreas saneadas.
Puntos de vista
Ávalos: «Las tierras deben ser repartidas por igual»
«Todos necesitamos tierras. Esas tierras fiscales que están ahí, como concesiones forestales, deben ser repartidas a ellos (CIDOB), a los campesinos, a las comunidades interculturales y al Conamaq. Es también para los jóvenes de todos los departamentos y de la ciudad que tienen derecho a la tierra. Ése es mi único pedido».
Nuny: «No pretendemos pelear con campesinos»
«Nosotros no pretendemos enfrentarnos con los hermanos campesinos, sólo estamos defendiendo las demandas de los pueblos indígenas del oriente boliviano. Aparte las demandas, como el aumento de escaños indígenas a 18, son pedidos que los venimos realizando hace tiempo, incluso se lo hice conocer al hermano Presidente».
Coraite: «Todos tenemos derecho a la tierra»
«La CIDOB tiene posiciones que se pueden radicalizar, quieren gestar conspiración contra el proceso de cambio que lo iniciamos junto a ellos. Aparte también pretenden perforar la Constitución Política del Estado, porque todos tenemos derecho a la tierra. No se dan cuenta que están siendo utilizados por intereses ajenos al proceso».
Zurita: «Estamos en estado de emergencia»
«Estamos en estado de emergencia para que las tierras fiscales no sólo pasen a la CIDOB, sino también a los campesinos. La Constitución Política del Estado, que la CIDOB apoyó, dice que la tierra es un derecho de todos. Por eso exigimos que la distribución de la tierra sea de manera equitativa para campesinos y para indígenas».