A once días del arribo del avión presidencial Dassault Falcon 900 EX Easy a El Alto, el Gobierno reconoció ayer que aún no hay personal que lo tripule, hasta tanto los pilotos habilitados entrenen con un piloto con más de 100 horas de vuelo en esa nave.
El ministro de la Presidencia, Óscar Coca, explicó que la empresa fabricante «habilitó» a los pilotos de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) para tripular el avión, empero, éstos deben cumplir al menos ocho horas de vuelo con un experimentado piloto del Falcon para operar el avión presidencial.
«Nosotros estamos a la espera de esos pilotos (experimentados). Es fácil comprender que ninguno de nuestros pilotos tienen esa cantidad de horas de vuelo (más de 100), por lo tanto, nuestros pilotos van a contar con un piloto de acompañamiento», informó.
El avión francés Dassault Falcon 900 EX Easy llegó al aeropuerto de la ciudad de El Alto el viernes 2 de julio. La aeronave, que había sido fabricada a pedido del Manchester United, uno de los club más ricos del mundo, costó 38,7 millones de dólares.
El semanario Pulso reveló en su edición del 11 al 17 de julio, que el avión presidencial no tenía piloto, porque los que fueron a capacitarse a la empresa francesa habían reprobado el curso. También informó que la aeronave fue traída a Bolivia por un piloto de nacionalidad estadounidense.
Coca no precisó de qué nacionalidad será el piloto experimentado que volará con sus similares nacionales, aunque descartó que se le pague 30 mil dólares. «No sé si es colombiano o venezolano», se limitó a señalar, sin precisar mayores elementos sobre el tema.
Asimismo, sostuvo que el seguro de la aeronave se adquirió de la empresa Credinform y llegaría a costar más de 250 mil dólares.
Una fuente de Pulso cuestiona el hecho de que se haya enviado a entrenar a coroneles de aviación que dejarán el servicio activo en menos de diez años. La pregunta es, ¿por qué no enviaron a una tripulación más joven, capitanes o mayores?, cuestionó la fuente.
El Ministro de la Presidencia destacó la experiencia de los pilotos bolivianos que fueron habilitados por la empresa francesa e insistió en la calidad y seguridad del avión presidencial.
«Éste avión lo vamos a cuidar y vamos a cumplir con todos los requisitos para que pueda estar listo para su uso, una vez tengamos ese piloto (experimentado)», reiteró el ministro, quien no precisó la fecha en la que llegaría a Bolivia el piloto extranjero.
La compra del avión presidencial fue autorizada a través de una disposición legal, que aprobó la adquisición directa de la aeronave.