La mesa de diálogo que instalaron ayer los líderes de la Confederación de Indígenas del Oriente Boliviano (CIDOB) y los representantes del Gobierno no logró frenar la marcha de este sector. Centenares de marchistas llegaron a la población de San Ramón y anunciaron que hoy continuarán su caminata rumbo a La Asunta (Santa Cruz).
El dirigente Lázaro Tacó informó que «hoy (ayer) tuvimos una reunión con los viceministros de Tierras y Medio Ambiente. Estamos sentándonos en la mesa de diálogo y mañana (hoy) vamos a continuar, pero la marcha sigue».
Según Tacó, el diálogo no avanzó y sólo «hubo un intercambio de información sobre saneamiento y titulación de tierras», que es una de las demandas del sector.
El presidente de la CIDOB, Adolfo Chávez, indicó que el tema autonómico ya está resuelto, pero que el Ejecutivo aún debe atender otros requerimientos como la conclusión del saneamiento de tierras, el derecho que tienen los pueblos indígenas a la consulta de los proyectos que se realizarán en sus zonas de residencia, entre otros.
Entretanto, la mayor preocupación que tienen los indígenas es el estado de salud de los niños que marchan junto a sus padres, pues la mayoría tiene resfríos a causa de los cambios constantes de temperatura. Según Tacó, la marcha sigue porque «nos ha molestado mucho que el Presidente (Evo Morales) diga que esto es una chacota, así que hemos sacado fuerzas y seguimos en la marcha a pesar del frío».