La gente acudió en masa a los mercados y a los bancos
La dirigencia cívica determinó la apertura de mercados y bancos para que la población se abastezca de alimentos y se continúe con la medida de protesta
«Necesito comida y abarrotes. Tengo tres hijos y ellos necesitan alimentarse. Todo se acabó», contó una madre de familia mientras buscaba algunos productos en los mercados potosinos, que abrieron sus puertas por unas horas para que la gente se reabastezca de alimentos y otros artículos.
El panorama era similar en la mayoría de las calles potosinas, la gente acudió masivamente a los mercados y bancos para conseguir alimentos y dinero en las dos a tres horas que el Comité de Movilizaciones y el Comité Cívico Potosinista (Comcipo) permitieron que se abran los bancos, mercados y otros centros comerciales.
«Estamos permitiendo el reabastecimiento para la canasta familiar, los mercados se abren hasta el mediodía», aseguró la mañana de ayer Celestino Condori, presidente de Comcipo.
La decisión de la dirigencia cívica permitió que los potosinos se abastezcan para continuar resistiendo en los siguientes días la huelga general y el bloqueo de las carreteras que ya cumplen las 14 jornadas.
El caos y la desesperación se apoderaron de la urbe potosina por un par de horas. La gente corría de un lado a otro para adquirir artículos de primera necesidad.
Una ciudadana protestó por el alza de precios en los alimentos. «Hay filas en todos lados, y aparte han hecho subir los precios una barbaridad», manifestó Janet Cruz a la agencia AFP.
Un reporte de la red PAT informó que los productos subieron sus precios entre uno y tres bolivianos. Por ejemplo, la carne se incrementó de Bs 24 a 25; 30 huevos, de Bs 18 a 20; el azúcar, de Bs 12 a 13; y la arroba de papa de Bs 25 a 35.
«Entre el pesimismo que existe, los comerciantes hicieron subir los precios, incluso no se encuentra papa y si hay, subió hasta 15 bolivianos», denunció otra ama de casa.
Bancos. A eso se sumó que algunos bancos se quedaron sin efectivo en sus depósitos, la gente acudió a sacar dinero de las entidades bancarias. «Esta situación es impaciente. ¿Ahora con qué plata voy a comprar alimentos para mi familia?», se preguntó un padre de familia en PAT.
La Policía prestó seguridad en los bancos y mercados. Luego replegó a sus unidades, cumpliendo con las decisiones de la dirigencia cívica.
También la población hizo filas para adquirir garrafas de gas. «No todos tenemos gas domiciliario, hay que esperar que llegue el camión porque no hay con qué podamos cocinar», manifestó una potosina en la fila.
Por otra parte, las agencias de turismo demostraron las pérdidas que provocó el bloqueo en Potosí. «20.000 turistas dejaron de entrar al país. Los grupos que ingresaban por Perú cancelan su ingreso y prolongan su estadía en ese país», informó un afiliado a la Cámara de Operadores de Turismo de Bolivia (Canotur).
Asimismo, en Potosí, las agencias de viajes se encuentran cerradas y lamentaron la pérdida de clientes. «Es como si el trabajo de dos años se fuera a la basura», dijo a La Razón el propietario de una agencia que prefirió el anonimato para no sufrir represalias.
Uyuni está paralizada
Un reporte de la red PAT evidenció que el acceso a Uyuni es nulo. Existe un grupo social que bloqueó el camino y que apoya a la dirigencia cívica de Potosí. Otro sector exige el desbloqueo porque su principal ingreso es el turismo.
Potosinos inician huelga en La Paz
Seis personas iniciaron una huelga de hambre en la ciudad de La Paz en apoyo a las demandas de Potosí. Paralelamente, los dos últimos parlamentarios que estaban en la extrema medida fueron evacuados a un hospital por su delicado estado de salud.
«Somos seis personas que hemos iniciado la huelga y para mañana (hoy) se está organizando otro piquete de huelga de hambre», afirmó Gonzalo Barrientos, uno de los huelguistas potosinos.
Entretanto, los residentes potosinos en este departamento expresaron su preocupación por las familias que están en la Villa Imperial, que desde hace 14 días está bloqueada y con un paro cívico que impide el comercio.
El cantautor potosino Luis Rico señaló que «intentaremos hacer una invitación personal al Presidente (Evo Morales) para intentar persuadirlo de que una comisión viaje a Potosí para atender las demandas».
Por otra parte, el senador Eduardo Maldonado (MAS) y el diputado David Cortez (Alianza Social), que continuaban con la huelga de hambre en la Asamblea Legislativa desde hace ocho días, ayer fueron evacuados a un centro hospitalario debido al deteriorado estado de su salud. Antes lo hicieron los legisladores Juan Carlos Cejas y Hugo García.
Toman planta eléctrica y San Cristóbal está amenazada
Un grupo de pobladores potosinos tomó una planta eléctrica que abastece de energía a la empresa minera San Cristóbal, sin embargo, no cortó la misma, por lo que los trabajos continúan, aunque el riesgo de paralizar la producción es latente.
En la minera San Cristóbal se informó que hasta las 19.00 de ayer no hubo corte de luz, aunque sí conocieron que pobladores de Yura tomaron la subestación de Punutuma, Potosí.
Según un reporte de la red PAT, un poblador advirtió que «esta mañana (ayer) se ha cortado la energía a la empresa San Cristóbal. Ahora estamos tomando las tres represas, una de Valle Hermoso; si en caso no se arregla (el conflicto), vamos a cortar la energía eléctrica a mitad de Bolivia».
Entretanto, el ministro de Minería, José Pimentel, afirmó que se están tomando medidas para garantizar la normalidad en la producción de la mina San Cristóbal, ante amenazas de interrupción del flujo eléctrico.
«Se están tomando algunas medidas para precautelar daños mayores, ante un posible intento de suspensión de la energía eléctrica», subrayó Pimentel a ABI.
El ministro remarcó que «lamentaríamos cualquier tipo de acción de esta naturaleza, por cuanto se estaría perjudicando enormemente a Potosí, un departamento esencialmente minero, que el año pasado recibió 59 millones de dólares (sólo por concepto) de regalías». La mina San Cristóbal es el yacimiento argentífero y de zinc más grande de Bolivia.