El ministro de Autonomías, Carlos Romero, informó que existe escaso trabajo legislativo en las nueve asambleas departamentales, lo que podría derivar en un proceso de deslegitimación institucional ante la población.
«Esa situación atenta a la dinámica que deben tener las asambleas legislativas y también las exponen; podrían sufrir algún proceso de deslegitimación ante la población», insistió la autoridad.
El gobierno de Evo Morales aprobó en mayo del 2010 la ley Transitoria para el Funcionamiento de las Entidades Territoriales Autónomas, que faculta a las asambleas departamentales a ejercer sus competencias exclusivas.
La Constitución Política del Estado prevé 36 competencias exclusivas de los gobiernos autónomos, sobre las cuales pueden legislar las asambleas departamentales. Sin embargo, las instancias deliberativas trabajaron hasta el momento sólo en la parte administrativa y presupuestaria.
Romero consideró que la falta de operatividad legislativa será superada con la vigencia de los estatutos autonómicos, aunque sostiene también que el diseño de esos instrumentos tropieza con algunos problemas.
«El estatuto es, según el artículo 275 de la Constitución Política del Estado (CPE), una norma institucional básica en el sentido de que es la norma que va a tener primacía para el desarrollo legislativo autonómico departamental. En realidad, las leyes autonómicas desarrollan los contenidos del estatuto, como las leyes nacionales desarrollan una Constitución», explicó.
El ministro identificó a la complejidad del proceso de transición de los consejos departamentales a asambleas departamentales como un factor que incidió en el trabajo de los asambleístas.
Los gobernadores fueron posesionados en sus cargos el 30 de mayo de 2010. Las nueve asambleas departamentales trabajaron en su organización interna, presupuestaria y hoy se enfocan a diseñar sus estatutos.
«Ahora esperamos que tomen mucho liderazgo estas asambleas porque tienen que crear liderazgo y tienen que ser referentes articuladores en cada región», desafió.
Romero solicitó a las asambleas enfocarse a diseñar su Plan de Desarrollo Estratégico para encaminar planes y programas en beneficio de sus regiones, en el área económica, productiva y social.