La audiencia de cesación de libertad que requirió el ex prefecto de Pando, Leopoldo Fernández, que enfrenta un juicio por los hechos violentos de Porvenir (2008), fue suspendida ayer por el memorial de nulidad que presentó la abogada que lo acusa, Mary Carrasco.
«Planteé una solicitud de cesación de mi detención preventiva ante el tribunal que está llevando adelante el caso (6º de Sentencia), pero fue rechazada sin argumento alguno, tal vez queriendo justificar que todavía existe el riesgo de obstaculización del proceso», lamentó el ex prefecto.
Afirmó que no había ningún sustento para ello, pero observaba que eran permanentes estas «acciones dilatorias» contra su proceso.
Su abogado, Karlo Brito, explicó que la audiencia, solicitada por su defendido, se suspendió debido a que Carrasco presentó un memorial de nulidad porque la oficial de diligencias que entregó las citaciones estaba suspendida.
Fernández reclama su libertad para asumir su defensa. Esta semana se cumplen dos años de su detención, que él la considera ilegal. Asegura «no tener absolutamente ninguna sola razón para fugarme u obstaculizar el proceso».
Fernández recordó que confió en el Gobierno cuando fue detenido en la oficina de la Prefectura pandina —según dijo— cinco días después de los acontecimientos violentos registrados en Porvenir.