El ex jefe del Departamento Segundo de Inteligencia del Ejército, general Orlando Paniagua, presentó su declaración como testigo de los ex jefes militares y reveló que en septiembre y octubre del 2003 no participaron grupos subversivos en las movilizaciones, sino que fue la población organizada la que efectuó huelgas de hambre, marchas y bloqueos.
El fiscal de recursos, Milton Mendoza, que lleva adelante el juicio de responsabilidades por Octubre Negro, calificó de importante esa declaración porque, por primera vez, un militar de la jerarquía de Paniagua revela que la población se movilizó y que no existía la presencia de grupos irregulares en las movilizaciones del 2003, cuando Gonzalo Sánchez de Lozada fue obligado a renunciar a la Presidencia.
Mendoza resaltó el rol que cumplió la ex defensora del Pueblo, Ana María Romero de Campero, durante el conflicto social del 2003. En septiembre, el Tribunal de Juzgamiento remitió a La Paz cuestionarios para que el presidente Evo Morales y la periodista desaparecida presenten sus testimonios en forma escrita.
Mendoza dijo que, en caso de que no se tenga esa declaración, se utilizará recortes de prensa en la que Romero de Campero cuestionó duramente las decisiones políticas del presidente Sánchez de Lozada con el inicio de una huelga de hambre que ella lideró.