El fiscal Gilbert Muñoz, encargado del caso Mario Cossío, fue sorprendido en oficinas del jefe de Bancada del MAS en el Senado, Isaac Ávalos. Entró en contradicciones cuando trató de explicar el motivo de su presencia en el lugar. La oposición puso en duda su imparcialidad.
Cerca a las 09.40, un grupo de periodistas se trasladó hasta la oficina del jefe de bancada masista, donde uno de ellos reconoció al fiscal de Tarija, pese a que éste trató inútilmente de pasar desapercibido cubriéndose el rostro leyendo un periódico. Una periodista le cuestionó el porqué de su presencia en la oficina del senador Ávalos.
Muñoz trató de eludir a los periodistas y se levantó abruptamente de la silla en la que estaba sentado. «Les pediría por favor de que no…», respondió escuetamente en una primera reacción, aunque poco después se vio obligado a responder, y recordó que una de sus funciones es informar a autoridades pertinentes.
«También los informes (del proceso) deben ser explicados a las autoridades que ejercen fiscalización. Si consultan a la Fiscalía General, está autorizada la información que la Fiscalía debe dar», explicó Muñoz; y añadió que el informe pedido, que fue frustrado, »se ha hecho por conducto regular, vía Fiscalía del Departamento y Fiscalía General».
Insistió en que se le solicitó un informe detallado del caso Imbolsur, donde está vinculado Cossío. Poco después, sin un documento en mano u objeto que lo contenga, abandonó la oficina del oficialismo.
Ávalos salió de su despacho y en la antesala explicó, a diferencia de Muñoz, que convocó de forma directa al fiscal, quien acudió a la cita, pese a estar en vacaciones. La reunión no llegó a concretarse.
En la tarde, La Razón se comunicó con el fiscal, quien, en contraposición a lo que expresó en la mañana, informó que acudió a la reunión por un pedido, vía teléfono que le hizo un asesor de Ávalos. Dijo que accedió a la solicitud, porque se encontraba en La Paz atendiendo asuntos personales, aprovechando su vacación anual.
«A mí me comunicaron, no sé pues quién será, será el asistente del senador, me dijo que era un asesor, que se había solicitado esa información (del proceso Imbolsur) y que debía dar un informe», relató vía teléfono celular, mientras esperaba, en el aeropuerto de El Alto, su vuelo de retorno a la ciudad de Tarija.
Muñoz presentó una acusación formal contra el gobernador de Tarija, que provocó, el 15 de diciembre, la suspensión de la autoridad y su posterior huida a Paraguay, donde goza de refugio provisorio hasta tanto se defina su situación.
El presidente Evo Morales fue consultado sobre el tema, y en su opinión un encuentro de estas características no debe entenderse como «que el jefe de bancada del MAS pretendió someter a ese fiscal». «Una reunión no es un compromiso político», señaló pocos minutos después de sorprenderse a Muñoz en las oficinas de Ávalos.
Desde la oposición, el ex general de Ejército y senador de Tarija, Marcelo Antezana, afirmó que la presencia del representante del Ministerio Público en oficinas del MAS es una muestra de la injerencia del Gobierno en el caso del gobernador.
«Esto despierta susceptibilidades que motivarán la solicitud de un informe oral al Fiscal General, Mario Uribe, para que explique la presencia de un Fiscal en un tema tan delicado», anunció el senador, quien afirmó que cualquier comparecencia de autoridad jurisdiccional debe hacerse vía conducto regular.
En Asunción, sectores del Legislativo y Ejecutivo se pronunciaron a favor del refugio. Morales afirmó que respetarán la decisión que se tome, pero insistió en que no se puede proteger la corrupción, y descartó que el tema afecte la relación con su homólogo Fernando Lugo. «No puede haber gobiernos, países, ni organismos internacionales que puedan proteger a corruptos», afirmó.
Muñoz aseguró que no trató de ocultarse. «He ingresado (al edificio de la Asamblea) exhibiendo mi identidad, sin esconder nada», afirmó.
Misión del Conamaq a Paraguay
Una misión del Consejo de Ayllus y Markas del Qullanas de la Nación Qhapaq Uma Suyu, afiliado al Conamaq, irá al Paraguay para pedir la expulsión de Mario Cossío, dijo el dirigente Carmelo Titirico. El contralor Gabriel Herbas recordó que se presentó contra Cossío cinco procesos judiciales.
La Conare podría emitir su fallo mañana
La Comisión Nacional de Refugiados (Conare) de Paraguay podría otorgar, el viernes, refugio al suspendido gobernador de Tarija, Mario Cossío, informó a AFP la senadora oficialista Zulma Gómez, representante del Senado en ese organismo.
«Existe la tendencia para aprobar el pedido de refugio, con más razón después de las declaraciones del presidente de la República (Fernando Lugo), quien admitió que Cossío siente que está perseguido en Bolivia», sostuvo la legisladora.
Lugo cuestionó, el martes, en una entrevista a la cadena CNN, la forma cómo fue suspendido Cossío, y aseguró que si la Conare se inclina por el refugio «no tendremos ninguna dificultad en acogerlo solidariamente».
La autoridad boliviana solicitó refugio, bajo el argumento de que es un perseguido político de Evo Morales. El Consejo de Gobernadores del Paraguay también pidió se decrete el asilo del boliviano, mientras el gobernador Carlos Amarilla lo declaró Huésped Ilustre. «Por más amigo que sea (Lugo) del presidente Morales, este es un asunto de derechos humanos», afirmó Gómez.
«Ni el presidente ni nadie pueden desconocer la tradición secular del Paraguay de solidaridad con los perseguidos. Eso nosotros lo tenemos muy claro», precisó la senadora. El viernes se reunirá la Conare para analizar el caso Cossío.