Cuatro legisladores opositores bolivianos mantuvieron esta semana contactos con el Congreso e instituciones en la capital estadounidense, para defender lo que consideran ataques contra la democracia y el Estado de Derecho en su país.
«El objetivo es hacer una denuncia a nivel internacional, para que todo el mundo sepa lo que está pasando en Bolivia», explicó en rueda de prensa Andrés Ortega, diputado del opositor Convergencia Nacional.
Ortega, senador y líder de la bancada opositora de derecha; Bernardo Gutiérrez, la diputada Norma Piérola y el senador Marcelo Antezana se reunieron entre otros con el representante republicano Michael McCaul (Texas) y el senador demócrata Robert Menéndez (Nueva Jersey), así como con instituciones privadas.
Los congresistas bolivianos aseguraron que se ven obligados a salir del país para denunciar lo que consideran acoso político por parte del gobierno de Morales. «No estamos dispuestos a asumir un silencio cómplice, por lo tanto, en el ejercicio de nuestros derechos políticos, salimos a decir lo que tenemos que decir», dijo Gutiérrez.
Los legisladores se reunieron igualmente con el ex candidato presidencial Manfred Villa-Reyes, que se instaló en Washington en enero del 2010 después de que la justicia boliviana presentara cargos en su contra. «Estoy esperando a que se restablezca el Estado de Derecho en Bolivia» para volver a ese país, dijo Reyes Villa, quien luego precisó que no se encuentra bajo asilo en Estados Unidos.