El defensor del Pueblo, Rolando Villena, informó a La Razón que en 1999 y 2004 se firmaron Convenios de Cooperación Interinstitucional entre su despacho, el Ministerio de Defensa y las Fuerzas Armadas para construir una cultura de respeto a los derechos humanos al interior de la institución castrense y en lo concerniente a las acciones militares.
Las líneas de acción definidas para la suscripción de esos convenios incluían capacitación a instructores de tropa y desarrollo e implementación de un currículo unificado de derechos humanos.
Además, en septiembre del 2008 se suscribió una adenda al convenio ampliando la vigencia del mismo por dos años más.
En ese marco, se hizo conocer que desde 2001 a la fecha se han desarrollado cerca de 279 talleres de capacitación y otra cantidad similar de sesiones informativas en todo el país. En estos eventos se capacitaron a 9.789 oficiales, suboficiales y sargentos de las tres fuerzas, según los informes anuales del Defensor del Pueblo.
«Éstos son elementos que nos tienen más que preocupados porque, siendo una institución defensora de los derechos humanos, ya tendríamos que haber contribuido a estas alturas a una baja ostensible de casos, de denuncias relativas a violación de los derechos humanos, pero no es así», indicó Villena, quien cree que todos esos esfuerzos son vanos.
Las Fuerzas Armadas deberían dar otra imagen, más cuando se habla de que Bolivia es un Estado pacifista, de acuerdo con la apreciación de Rolando Villena.