La Policía de Investigaciones de Chile desbarató una banda de narcotraficantes que pretendía distribuir 3 millones 179 mil dosis de pasta base de cocaína comprada en Bolivia y detuvo a 15 personas, entre ellas un boliviano.

La banda de traficantes tenía su base de operaciones en La Calera (ciudad de la región de Valparaíso, en el litoral central chileno) y tenía planeado comercializar la droga en la zona sur de Santiago, informa el portal Emol.

La organización fue desbaratada gracias a la operación «La Ballena», cuyo nombre se debe al balneario donde el supuesto líder narco tenía su casa. La investigación duró siete meses, informa La Tercera.

El boliviano detenido estaba encargado de «cortar» la droga con precursores químicos para aumentar su cantidad y ganar más dinero.

La totalidad de los detenidos quedaron el 9 de mayo en prisión preventiva, luego que el Ministerio Público los acusara de una serie de delitos relacionados con la distribución de narcóticos en la zona central de nuestro país, informa el periódico El Observador.

El jueves de la semana pasada, la Policía allanó 16 casas en La Calera y tres en Santiago.

Durante los primeros allanamientos se decomisaron 211,97 kilos de la droga que había sido ingresada desde Bolivia y que estaba avaluada. De éstos, 130 kilos se encontraban en el laboratorio clandestino, según explicó el subcomisario Marcelo Rebolledo.

Además, la Policía se incautó de diez vehículos, varios de ellos de alto valor; dos cuadrimotor; 4,4 millones de pesos chilenos (66 mil bolivianos aproximadamente); 35 celulares; seis balanzas y electrodomésticos, además de otras especies.

El acusado de encabezar la organización criminal, que también fue detenido, es Pedro Melo Ortega (30), alias «El guatón Peno», quien según Rebolledo hace un mes había sido condenado a cinco años de presidio por tráfico de drogas en la ciudad de Quillota, causa que aún no ha sido ejecutoriada.

Trascendió que el imputado tenía «comprados» a los vecinos de la población Entre Puentes, y además financiaba al equipo de fútbol del barrio para ser avisado en caso de que hubiera policías mientras él hacía las transacciones.