Los indígenas que participan en la VIII Gran Marcha Indígena instalarán hoy, en El Totaizal, las seis mesas que fueron acordadas con una comisión gubernamental el jueves y esperarán la llegada de los ministros para iniciar el diálogo. Si no se instala la negociación, mañana reanudarán la marcha a La Paz. Las carreteras del Chaco también amanecerán bloqueadas por los guaraníes, según anunciaron los dirigentes.
«Estamos preparados para iniciar el diálogo, porque en eso quedamos. Confiamos en que los ministros van a estar llegando a San Borja, una población más accesible. Eso es lo que les corresponde hacer», informó ayer el presidente de la Confederación Indígena del Oriente, Chaco y Amazonía Boliviana (CIDOB), Adolfo Chávez.
Hasta anoche, ningún funcionario de Gobierno intentó un acercamiento con los indígenas para informar sobre un encuentro. «Nadie llegó a la zona a dejar al Comité de Marcha alguna señal de poder abrir el diálogo», dijo Chávez.
Los marchistas exigen la presencia de 10 ministros para iniciar las mesas de diálogo (Educación y Comunicación; El TIPNIS, los Bosques, las Áreas Protegidas y el Medio Ambiente; Tierra y Territorio, Autonomías, Censo y Consulta Previa; Salud; Vivienda y Desarrollo Productivo; y el Aguaragüe) que fueron acordadas previamente con una comisión gubernamental al mando de los ministros de Obras Públicas, Wálter Delgadillo, y de Desarrollo Productivo, Teresa Morales.
En la marcha, se informó también que en parte de la carretera hacia Paraguay, en el departamento de Tarija, los guaraníes iniciarán un bloqueo desde mañana, a las cero horas, en caso de que el diálogo no prospere hoy.
Pedidos. La marcha espera resolver con el Gobierno 16 puntos de una plataforma de demandas que fue presentada en el Palacio de Gobierno.
El primer punto se refiere al Territorio Indígena Nacional Parque Isiboro Sécure (TIPNIS). Exigen también la paralización de todas las actividades hidrocarburíferas en el Parque Nacional Aguaragüe en Tarija; que el Estado garantice a los territorios indígenas saneamiento y titulación de sus territorios, y expropiación de terrenos a favor de ellos; además de la creación de un Fondo Verde para el cambio climático.
También esperan el desarrollo normativo y el derecho a la consulta para la construcción del Túnel Aguaragüe y de las vías San Borja-Rurrenabaque y San Buenaventura-Ixiamas; piden recursos para los pueblos indígenas, Chaco, Amazonía y los 34 pueblos de tierras altas y bajas; autonomía indígena; una Ley de Bosques y la paralización de directrices forestales; entre otras.
Ayer, por instrucción del Comité de Marcha, una comisión de indígenas realizó una inspección ocular del Tramo III de la carretera entre Villa Tunari (Cochabamba) y San Ignacio de Moxos (Beni) que estaría siendo desmontado para iniciar los trabajos de la vía. «Este camino está siendo desmontado, están sacando la madera, los árboles están siendo cuartoneados sin la autorización de la ABT del Beni. Estarían atropellando territorios indígenas con máquinas. Eso ya es una ilegalidad, porque los árboles les pertenecen a nuestros hermanos», señaló Adolfo Chávez.
En el campo de la salud, las infecciones respiratorias agudas (IRA), la fatiga muscular y las enfermedades diarreicas agudas (EDA) son los males más comunes de los marchistas.
El médico Sergio Bejarano, que acompaña la marcha, y personeros del Ministerio de Salud, indicaron que hasta el viernes, más de 250 pacientes fueron atendidos por las brigadas de salud en tan sólo una semana.
La última información de los médicos señala que se atendieron a más de 100 pacientes que han acudido a consultas por los resfríos, diarreas y por la fatiga muscular.
Justifican presencia de niños
El dirigente Celso Padilla justificó la participación de niños en la marcha junto a sus padres. Agregó que si autoridades del Gobierno cuestionan esta presencia, «¿por qué no brindan los medios necesarios para que ellos se mantengan en sus casas, respondiendo nuestras demandas?…si lo quieren mostrar como una forma de maltrato, no se van a solucionar los problemas, sino lo van a agravar más».