Parada sobre un morro de tierra desde el que flamea una bandera nacional, Nelly D. (67) protesta en Yucumo por la falta de un acuerdo entre el Gobierno y los indígenas que rechazan la construcción de una carretera por el TIPNIS. Enfrente, una zanja de medio metro de profundidad es el símbolo de la radicalización de la protesta que comenzó hace una semana.
La decisión es mantener la barricada hasta que Gobierno e indígenas solucionen sus diferencias y para ello los pobladores amenazan con bloquear, de ser necesario, la ruta bioceánica que conecta Brasil con Chile.
«Queremos soluciones y, si no, vamos a masificar la protesta bloqueando el camino bioceánico. Es decir, el camino que llega a Rurrenabaque-Guayará y que llega a La Paz», anunció el presidente de la Coordinadora de la Amazonía de Bolivia, René Huaro.
A las 09.00 de ayer, los bloqueadores levantaron su protesta por 15 minutos para dar paso a vehículos que transportan gasolina, gas licuado y alimentos. «Venimos para lograr que pasen los autos, pero lo harán por un rato», explicó el asambleísta departamental por el oficialista Movimiento Al Socialismo (MAS), Heriberto Cazorla, quien llegó al punto de bloqueo para sumarse a la movilización.
Un tractor abrió el paso para que los camiones circulen rumbo a San Borja (a 50 km) o a La Paz y tras los 15 minutos el mismo tractor levantó un montón de tierra, repuso la barricada y abrió una nueva zanja para el bloqueo. «¿Qué tenemos que ver nosotros con estos problemas? nos perjudican en nuestro trabajo», protestó un conductor impotente ante la protesta.
Los bloqueadores anunciaron que esperarán a los marchistas que se encuentran en San Borja, pero descartaron enfrentamientos. «Si llegan acá no habrá conflictos; al contrario, les exigiremos que sigan con el diálogo y si es posible nosotros más dialogaremos con ellos», anunció el secretario ejecutivo de Yucumo, Adrián Lovera. El presidente de la Asamblea del Pueblo Guaraní, Celso Padilla, criticó la medida.
Pedido de desbloqueo
La ministra de Justicia, Nilda Copa, pidió a los marchistas conformar una comisión para llegar a Yucumo e intentar el desbloqueo. «Nosotros como Gobierno no tenemos nada que ver con esa movilización».
Fallece otro niño en la marcha por el TIPNIS
La marcha por el TIPNIS cobró su segunda víctima, el niño Juan Uche Noé murió en San Borja por problemas gastrointestinales. El Servicio Departamental de Salud (Sedes) del Beni informó que las afecciones diarreicas afectan a la mayoría de los menores que están en la caminata, ya que tomaron agua contaminada.
«Poco se pudo hacer», lamentó el doctor del hospital de San Borja, Luis de la Cruz, quien informó que el niño Uche llegó al nosocomio la noche del domingo ya en estado grave.
Ésta es la segunda baja fatal en la marcha, luego de que un adolescente cayera de un vehículo durante el recorrido por San Ignacio de Moxos. El médico Carlos Boero, del Sedes del Beni, informó a La Razón que las afecciones de diarrea «afectan a la mayoría» de los niños que marchan.
Paralelamente, la salud de los indígenas que acampan en San Borja se complica tras 21 días de movilización. Existen dos casos de aborto y un adulto mayor que tiene problemas con el apéndice y necesita atención.
Mediante una carta enviada a sus dirigentes, la ministra de Justicia, Nilda Copa, exhortó al sector indígena a reinsertar a las brigadas médicas del Gobierno para que atiendan a los marchistas afectados, pedido que al final fue aceptado.