Icono del sitio La Razón

El diálogo no avanza y declaran cuarto intermedio por el TIPNIS

A las 20.15 y en penumbras se decretó un cuarto intermedio en el diálogo sostenido entre los indígenas y el canciller David Choquehuanca. «Esperaremos hasta el jueves (mañana) para que nos envíen una respuesta escrita a nuestras demandas», dijo anoche Adolfo Chávez, de la Confederación de Pueblos Indígenas del Oriente Boliviano (CIDOB).

En tanto aguardan la respuesta escrita por parte del Gobierno, los marchistas se quedarán en la población de San Isidro de La Embocada, a 25 kilómetros de Yucumo, que ayer realizó un paro cívico en contra de la marcha.

Chávez no se animó a indicar si la movilización se reanudará el viernes. «No puedo decir, porque debemos esperar todavía la carta», señaló el dirigente.

DEMANDAS. Durante la mañana y la tarde, los dirigentes indígenas leyeron los 16 puntos de sus demandas y luego se turnaban para explicar detalles sobre cada uno de los mismos.

El Canciller remarcó que los indígenas ya conocían la posición del presidente Evo Morales, que hace dos semanas señaló que la carretera entre Villa Tunari y San Ignacio de Moxos se haría «sí o sí». «Ahora nosotros estamos abiertos a la consulta, que es un encuentro. La consulta (con indígenas del TIPNIS) no se hace con fantasmas y con todas las normas nacionales e internacionales». Choquehuanca les expresó además su predisposición de escucharlos y de llevar ese mensaje al presidente Morales.

Acuñó también dos nuevas palabras para hacerles entender la relación de armonía que debe existir con la Pachamama al hablar de la «cosmobiovisión» y del «pensasiento», ante algunas miradas de incredulidad de parte de algunos indígenas.

Por su lado, los marchistas insistieron en que no están de acuerdo con una carretera que ingrese por el Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS). En tanto, Choquehuanca enumeraba uno a uno los diferentes compromisos que tenía Morales en los próximos días, por lo que no podría venir hasta La Embocada. «Hemos pedido que conformen una comisión para que el Presidente los reciba», reiteró Choquehuanca. No obstante, la reunión podría llevarse a cabo después del 25 de septiembre, situación que molestó a los indígenas marchistas.

El Canciller se comprometió además a verificar si el campo Margarita se encuentra en el Parque Nacional Aguaragüe. Una de las 16 demandas es que se paralicen las obras en esa región, porque eso afectaría a los recursos hídricos. El Gobierno dijo que si se acepta la demanda de los marchistas, eso afectaría a los ingresos del Estado boliviano.

Durante las siete horas de diálogo, los ministros de la Presidencia y de Obras Públicas no hablaron.

Mientras los dirigentes fundamentaban su posición, ambas autoridades sólo oían y al final hubo un pequeño incidente cuando los guardias indígenas no quisieron permitir el ingreso de Romero y Delgadillo a la última reunión con Choquehuanca. Romero ingresó al final, pero su técnico no pudo entrar. Sobre el final, Choquehuanca respondió con serenidad a las críticas de Dora Zita, una pobladora del TIPNIS. «El pueblo es sabio, esto (el problema) puede resolverse en un mes. Nosotros luchamos 500 años». A lo que Zita dijo: «Mire nomás la esperanza que nos da…».

Canciller no conoce sobre el accionar de la Policía

El ministro de Relaciones Exteriores, David Choquehuanca, dijo desconocer las maniobras policiales que los uniformados hacen cerca de la población beniana de Yucumo y que fueron denunciadas por los indígenas como un preparativo para la intervención. «Yo no conozco de estos ejercicios, no creo que los policías hayan hecho ejercicios para contener la marcha. No creo.

Estaba hablando con los hermanos que me decían que si podían marchar y yo les decía que vayan nomás, que caminen. No les van a amarrar, si no están obstaculizando las carreteras tienen derecho», agregó el jefe de la diplomacia boliviana.

POLICÍAS. Unos 400 policías están acuartelados en instalaciones del cuartel de la Unidad Móvil de Patrullaje Rural (Umopar), otro grupo de avanzada está en un aserradero y ayer una decena de uniformados esperaba a sólo 500 metros de la reunión en La Embocada.

«Si algo nos pasa será responsabilidad del Gobierno», advirtió ayer un marchista indígena convencido de que la movilización debe reanudarse este viernes rumbo a Yucumo, en el límite interdepartamental con La Paz.

Morales ratifica que ‘hay temas que no se pueden atender’

El presidente Evo Morales ratificó anoche en la ciudad de Cochabamba que algunos temas planteados por los marchistas en su pliego de 16 puntos no pueden ser atendidos y menos entrar en debate.

«Hay temas que no se pueden atender y eso no está en debate», afirmó el Jefe de Estado al hacer referencia al pedido de los indígenas de paralizar todas las actividades hidrocarburíferas en el Parque Nacional Aguaragüe o que las tierras fiscales y las áreas protegidas pasen a  manos de la Confederación de Pueblos Indígenas del Oriente Boliviano (CIDOB).

«Los marchistas reiteran que todas las tierras fiscales y las áreas protegidas pasen a manos de la CIDOB. Y quiero ser claro: esto no va a ser atendido, no vamos a atender. Las tierras fiscales y parques nacionales son de todos los bolivianos y no puede ser pues de una organización», sostuvo.

El presidente Morales también acusó a los marchistas de usar como pretexto la defensa de la «Madre Tierra para tratar de perjudicar este proceso» de cambio.

«Nos mandan una nota donde dicen que quieren acceder al Fondo Verde y nos piden que los recursos económicos del Aguaragüe pasen a los hermanos indígenas. Esta propuesta viene del capitalismo», dijo el Mandatario en la ciudad de Cochabamba.