Bolivia corre con la repatriación de tres cadáveres
Aclaración. Cónsul General desvirtúa declaraciones del presidente de Acifebol
La madrugada del martes 13 de septiembre, los bolivianos Emilio Huanca, su esposa Yamila Machaca y el hijo de la pareja Kevin Huanca Machaca, de un año, perdieron la vida en un choque entre dos trenes y un bus, en el barrio flores, de Buenos Aires.
Víctor Zelaya Vergara, también boliviano, será sepultado en Argentina.
La Razón publicó en su edición del sábado 17 de septiembre una nota informativa bajo el título «Argentina pagará traslado de bolivianos», cuya fuente es Alfredo Ayala.
Ayala, presidente de la Asociación Civil Federativa de Bolivia (Acifebol), denuncia en la nota en cuestión que el Consulado boliviano negó ayuda a la familia de los fallecidos, lo que habría generado malestar entre los residentes bolivianos.
«Es indignante, el Consulado boliviano negó toda ayuda económica para repatriar los cuerpos de nuestros compatriotas. Entonces estábamos iniciando una campaña para ayudar a la familia, pero la Cancillería de Argentina confirmó que pagará el traslado», dice el aludido, a quien este diario identifica en la nota de referencia como representante de la comunidad boliviana.
Ayer, Ramiro Tapia negó la veracidad de esta información y le restó toda representatividad a Ayala, de quien dijo que es «una persona descalificada, que falta a la verdad».
Representatividad. «El señor Ayala no puede arrogarse la representatividad de todos los bolivianos en Argentina. Los bolivianos no tenemos una representación única», precisó.
«Ellos (Gobierno argentino) nos han ayudado en todos los trámites legales, hemos realizado un trabajo arduo. El trámite de repatriación dura aproximadamente 15 días, pero los cuerpos estarán en el país en las próximas horas gracias al trabajo que realizamos», puntualizó.
Tapia también explicó que una vez concluido el proceso legal en Argentina, «los causantes del accidente tendrán que reembolsar los gastos incurridos al Estado boliviano». La repatriación de los cadáveres cuesta alrededor de $us 1.550 por cada cuerpo. La justicia argentina aún investiga el caso.