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Lluvia y 14 sectores en el inicio de la marcha

La columna estaba formada por unas 400 personas, algo menos del casi millar de indígenas que inició la marcha en 2011. Todos se encomendaron a la Virgen de Loreto, Patrona de Trinidad.

Encabezaban la marcha una decena de personas vestidas de  macheteros, mujeres con tipoy, acompañados por una “bombilla” (banda de música oriental) y con banderas blancas con la flor de patujú impresa. La Razón contabilizó 14 organizaciones: siete indígenas y otras siete pertenecientes a sectores sociales. Dirigentes prevén que este fin de semana otros grupos indígenas del oriente se sumen a la caminata.

Al menos 100 indígenas procedentes de Yacuiba y Caraparí, Tarija, arribarán el fin de semana.  En Santa Cruz, Celso Padilla, de la Asamblea de Pueblos Guaraníes (APG), confirmó el arribo de indígenas del sur del país. “Nos plegaremos a la marcha el lunes”.

‘Marce’. Marcelo o “Marce”, como le llama su abuelo Alfredo Aramayo, acaso es el marchista más joven: “Es mi nietito e irá con su madre Tatiana, que es mi hija”, contó ayer Alfredo tras bajar de la embarcación que los trajo por el río Mamoré.

Mientras que el diputado indígena Pedro Nuni acusó al Gobierno de “comprar dirigentes” con regalos para que éstos apoyen la consulta. El secretario ejecutivo de la COD del Beni, Juan Acosta, pidió al Comité Cívico beniano que convoque a un paro departamental si en San Ignacio de Moxos se bloquea el paso de los marchistas.

Por su parte, el dirigente Rodolfo Antezana, de la comunidad Vida Nueva, dijo que el Gobierno los amenazó con no arreglar sus caminos si se sumaban a la marcha del TIPNIS. “Nos han dicho que nos van a meter presos y que no van a arreglar los caminos”, declaró a los periodistas. También ayer un equipo de voluntarios acreditaba a marchistas y a la prensa nacional e internacional en las oficinas de Cáritas. “Hasta ahora tenemos unos 30 periodistas acreditados”, dijo una de las voluntarias. En total se prepararon 2.000 credenciales para certificar a toda la movilización.

La marcha avanzó 20 km ayer. Tras recorrer el centro trinitario en medio de aplausos, pasó ante el monumento al indígena Pedro Ignacio Muiba, y llegó a Puerto Varadero, donde pernoctó en una escuela.

Cuatro motocicletas dieron seguridad a los caminantes en el centro de la ciudad y pese a los anuncios de rechazo, el grupo avanzó sin problemas.  Una reunión definía anoche la hora de salida para la segunda jornada, en la que la caravana debe cruzar el río Mamoré en barcazas, rumbo a San Ignacio.