Aplica método para resolver las protestas
Gobierno dice que resolvió ‘con éxito’ los conflictos que enfrentó durante su gestión
El motín policial fue el último conflicto que enfrentó el Gobierno y que concluyó con acuerdos. Como esta protesta, la administración de Evo Morales afirmó que resolvió “todas con éxito”, aplicando un método de resolución de conflictos.
En los últimos nueve meses el Ejecutivo se enfrentó a cuatro protestas. La VIII marcha indígena, que llegó a La Paz en octubre de 2011, el paro médico, el enfrentamiento entre mineros en Colquiri y el motín policial.
Estos dos últimos conflictos fueron catalogados de “alta peligrosidad” por el Gobierno. El viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, César Navarro, detalló que la estrategia del Ejecutivo fue aplicada “con éxito” en todas las demandas.
“Todos los conflictos, entre sociales y políticos, fueron solucionados con éxito por el Gobierno. Se aplicó estrategias que implican desde demostrar paciencia hasta evitar el uso de la coerción”, indicó Navarro.
Por ejemplo, para resolver las protestas de los policías amotinados y de los mineros en Colquiri, el vicepresidente Álvaro García explicó que se empleó una estrategia “de resolución de conflictos” para evitar víctimas fatales. Detalló cinco puntos que se ejecutaron en el método.
Un primer aspecto consiste en que se entendió los problemas en todos sus contenidos; un segundo, fue la insistencia en el diálogo con los dirigentes movilizados; tercero, detalló el vicepresidente García Linera, no se cayó en la “tentación” de soluciones “populistas e irresponsables”.
Una cuarta acción fue la “paciencia y la humildad” durante las movilizaciones. Este elemento es el que más ponderan las autoridades de Gobierno. Navarro manifestó que no se trata de desgastar el conflicto, sino que se pretende conocer todas las demandas de los movilizados. Como quinta acción, y la más elemental para García, es que no se utilizó a las Fuerzas
Armadas para responder a los ataques de los policías amotinados y de los mineros que se enfrentaron en Colquiri.
En el motín policial, el Ejecutivo identificó seis “elementos materiales” de aprestos golpistas en Bolivia. Estos factores fueron gestados por actores políticos “de la derecha”, dijo García.
Acusó al MSM y UN de estar detrás del conflicto policial.
Respaldo de sectores
Apoyo
Durante el desarrollo de los conflictos, los movimientos sociales salieron a defender la gestión de Evo Morales y el proceso de cambio. En el motín policial denunciaron que existían “aprestos golpistas” detrás de esa movilización. Dijeron que se movilizarán.
La existencia de peleas es señal de democracia
“Sólo en los cementerios no existen conflictos”, así se refirió el vicepresidente Álvaro García Linera sobre la situación del país cuando enfrentaba una serie de protestas.
“Las sociedades que no tienen conflictos son las sociedades muertas. No hay conflictos en los cementerios. No hay que temerle a la conflictividad. La vida es conflicto, es una lucha permanente”, consideró García Linera en conferencia de prensa el último jueves.
Así, la autoridad destacó que “en toda democracia existen conflictos, si no hubieran conflictos no hubiera democracia”, resumió.
Después de resolver el motín policial, García destacó la estrategia gubernamental para resolver las protestas. “Fue el éxito de un método de resolución de conflictos de alta peligrosidad (…) Esta semana vivimos un conflicto policial y se empleó una estrategia exitosa”, dijo.
El Gobierno, en los últimos nueve meses, enfrentó cuatro conflictos: La VIII marcha indígena (octubre 2011), el paro médico, enfrentamientos entre mineros cooperativistas y asalariados y motín policial.
García clasificó en dos tipos los conflictos. Uno de carácter social y otro de orden político. Además dijo que las movilizaciones son por la redistribución de la riqueza.