Alrededor de las cinco de la madrugada del domingo, los seguidores de Adolfo Chávez tomaron la sede de la Central de Pueblos Indígenas de Bolivia (Cidob), que el viernes había sido ocupada por Melva Hurtado, nueva presidenta de la organización indígena.
En la acción, seguidores del destituido presidente, Adolfo Chávez, retuvieron al presidente de la Central de Pueblos Indígenas del Beni (Cepib), Pedro Bare, a quien el expresidente desconoció, y le aplicaron el castigo del cepo aduciendo usos y costumbres.
A las 14.00, seguidores de Melva Hurtado, que superaban en número a los de Adolfo Chávez, retomaron la sede de los indígenas. Ambos enfrentamientos dejaron una decena de heridos.