Sucre festejó la independencia de Bolivia con los tradicionales actos protocolares como la iza de la Tricolor, el depósito de ofrendas florales al pie del Acta de la Independencia y el desfile cívico-militar, pero con la notoria ausencia de las autoridades judiciales que asistieron a los actos oficiales de Oruro.
Los actos comenzaron con la iza de las banderas Nacional, de Chuquisaca y la Wiphala en el frontis de la Casa de la Libertad, donde nació Bolivia hace 187 años. En el mismo repositorio, las autoridades nacionales y departamentales depositaron las ofrendas florales.
Luego se trasladaron a la Catedral Metropolitana, donde el monseñor Jesús Pérez Rodríguez convocó a la unidad de los bolivianos y pidió defender la vida y la soberanía territorial.
Las autoridades departamentales y locales, encabezadas por el gobernador Esteban Urquizu y el alcalde de Sucre, Moisés Torres Chivé, abrieron el desfile cívico-militar que se caracterizó por el alto civismo y patriotismo de los sucrenses.
No asistieron los presidentes del Tribunal Supremo de Justicia, Gonzalo Hurtado; del Tribunal Constitucional Plurinacional, Ruddy Flores; del Tribunal Agroambiental, Bernardo Guarachi; ni el fiscal general del Estado, Mario Uribe. Sólo participaron del desfile algunos magistrados titulares y suplentes, como Gualberto Cusi.