Embajadora de Perú espera que tema Suches sea resuelto por la vía diplomátic
Además señaló que aún hay que esperar más información del caso, ya que en la zona se encontraron maquinarias con matriculas bolivianas, que habrían ingresado a territorio peruano sin cumplir los requisitos de Ley.
La embajadora de Perú en Bolivia, Silvia Alfaro, espera que el conflicto existente en la zona de Suches, en el departamento de La Paz, sea resuelto por la vía diplomática. Insistió en que el operativo ejecutado el viernes fue en territorio peruano, aunque señaló que espera mayor información sobre lo sucedido.
“El tema se tratará como corresponde, por la vía diplomática tratando el asunto a nivel respetuoso entre las autoridades correspondientes para que el hecho se esclarezca», indicó a los periodistas, según publicó la gubernamental agencia ABI.
Una comisión oficial integrada por miembros de la Gobernación, Cancillería y la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) certificó ayer en Suches que ciudadanos peruanos vestidos con uniformes de policías y militares ingresaron el viernes violentamente en la zona del río Suches, en la comunidad del mismo nombre. Cooperativistas denunciaron el lunes lo ocurrido.
El gobernador de La Paz, César Cocarico, fue parte de la comisión. Con la inspección “estamos comprobando” en gran parte la denuncia realizada por los cooperativistas, señaló ayer.
Alfaro sostuvo que según información oficial de su país, el viernes pasado se realizó un operativo policial en Perú, a pedido de la Superintendencia Nacional de Aduanas y Asuntos Tributarios del vecino país, para efectuar una requisa de maquinaria de contrabando existente en la zona de Suches.
“La información oficial que tengo, está suscrita por fiscales del Perú y funcionarios de la Superintendencia, en el sentido de que esto ha sido en el territorio peruano, pero esto lo estamos tratando directamente con las autoridades bolivianas”, afirmó.
Asimismo, recordó que aún hay que esperar más información del caso, ya que en la zona se encontraron maquinarias con matriculas bolivianas, que habrían ingresado a territorio peruano sin cumplir los requisitos de Ley.
“Llevaban en sus chalecos el nombre de Sunarp y otros de la Aduana. Eran militares más que todos, de 250 a 300”, relató una testigo que prefirió guardar su nombre en reserva al periodista de La Razón Digital que fue a la zona.