El hermano del narcotraficante Maximiliano Dorado Filho, Aníbal Ezequiel Gómez Filho, fue remitido anoche a la cárcel de Palmasola, en calidad de detención preventiva, por los delitos de legitimación de ganancias ilícitas con dinero proveniente presuntamente del tráfico de drogas.
El Ministerio Público acusa a Aníbal Dorado de formar parte de una organización criminal que estaría integrada por el norteamericano Jacob Ostreicher (encarcelado en Palmasola), Claudia Liliana Rodríguez (presa en la cárcel de La Paz) y Ozzie Dorado Filho (prófugo de la justicia), dedicada a la actividad ilícita de legitimación de ganancias con dinero proveniente supuestamente del narcotráfico.
El juez 4° de Instrucción en lo Penal de Santa Cruz, Erwin Jiménez, luego de valorar las pruebas presentadas por la Fiscalía y la defensa del imputado, ordenó la detención preventiva en Palmasola del acusado.
El director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN), coronel Gonzalo Quezada, afirmó el jueves que Aníbal rearticuló la organización criminal que dejó su hermano para el envío de cocaína desde Bolivia al Primer Comando de la Capital (PCC) de Brasil.
Piloto. Aníbal Ezequiel, de formación piloto aviador profesional, llegó a la audiencia cautelar enmanillado y acompañado de dos escoltas. Al percatarse de la presencia de los medios de prensa se cubrió el rostro con una polera a fin de no ser identificado.
El fiscal Carlos Robles, en su imputación presentada ante el Juez, detalló que la organización de la que formaría parte Aníbal Ezequiel, estaría dedicada a la adquisición de bienes e inmuebles en las zonas urbana y rural, además de maquinaria agrícola y vehículos, “hay antecedentes de que esta organización había movido en el país cerca de $us 25 millones desde 2008”.
“La modalidad de la operación de la supuesta organización orquestada o liderada por Maximiliano sería efectuar una actividad con aparente legalidad, si bien las operaciones se desarrollaban con dinero ilícito”, expuso Robles.
El fiscal informó que la investigación en contra de Aníbal Ezequiel fue realizada a raíz de la adquisición de un bien inmueble valuado en alrededor de $us 180 mil, ubicado en el barrio Hamacas de la ciudad de Santa Cruz, donde fue aprehendido el 18 de septiembre, junto a otras cuatro personas, las que luego fueron liberadas porque no se les encontró relación alguna con lo que se indaga.
Robles explicó que el inmueble habría sido adquirido por Aníbal Dorado con dinero enviado por su hermano Maximiliano, quien purga una condena en Brasil. Así se citó a Aníbal para que declare sobre la procedencia del dinero para la adquisición del bien, pero éste nunca se presentó a declarar, hecho que derivó en el allanamiento y la posterior aprehensión.
Fernando Ribera, abogado del Ministerio de Gobierno, que se convirtió en la parte querellante de este caso, manifestó que había un vínculo directo entre Maximiliano con “Ozzie y Aníbal Dorado, quienes habrían tomado la posta (de la organización criminal) una vez que fue aprehendido (el primero). Hay elementos de convicción que muestran ese detalle”, dijo.
Ribera declaró que en la documentación decomisada a Aníbal se encuentra un cheque de $us 50 mil, un papel manuscrito que será sujeto de un peritaje, además de otras pruebas. “También se halló documentos de un carro con placa 1493-HTI que habría sido comprado a su sobrina Jéssica Dorado. La investigación reveló que pertenecería a Maximiliano”, subrayó Robles.
Labor de los hermanos Dorado
Banda
La FELCN sostiene que Aníbal y Ozzie Dorado rearmaron la organización criminal que dejó su hermano Maximiliano, cuando éste fue detenido en 2010. Los Dorado enviaban droga al Primer Comando de la Capital de Brasil.
Elaboran ley para derribar narcoaviones
El Ministerio de Defensa informó que para mejorar las labores antidrogas trabaja en la implementación de un sistema de radares en fronteras y en la elaboración de un proyecto de ley que permita a los aviones K-8 derribar aeronaves de narcos. “Estamos trabajando junto con el Comando General de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) en el proyecto de Ley de Interceptación de Vuelos Ilícitos”, señaló Rubén Saavedra, ministro de Defensa.
Tras la fase de elaboración, se prevé la socialización del proyecto y luego su remisión a la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) para el respectivo tratamiento. La norma que permitirá a la FAB, en caso extremo, derribar naves que no obedecen al llamado de aterrizar en suelo boliviano, fue solicitada por el presidente Evo Morales en diciembre de 2011. De hecho, el vicepresidente Álvaro García Linera anunció en ese entonces que se aprobaría en 2012.
De esta norma se servirán los aviones K-8, según Saavedra, quien indicó que la implementación de un sistema de radares en las fronteras permitirá contar con información exacta cuando se presenten estos vuelos ilícitos. Afirmó que ya se recibió ofertas y que están siendo evaluadas por la FAB para ver luego las condiciones legales y del financiamiento.