El ministro de Gobierno, Carlos Romero, tildó de “sesgado y político” el informe del Defensor del Pueblo cuando habla de la consulta; es un texto “armónico” con el MSM, dice. Rolando Villena rechaza cualquier militancia política, antes o ahora.
El informe defensorial responde a una crítica “con un sesgo político de mala fe que creemos armónico y coincidente con el posicionamiento político del Movimiento Sin Miedo, con el que frecuentemente suele coincidir, en su crítica y posicionamiento, el Defensor del Pueblo (Rolando Villena)”, aseveró Carlos Romero.
El ministro se refirió a las conclusiones de Villena sobre la consulta efectuada en el Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS). El Defensor encontró allí violación de los derechos humanos de los indígenas; la consulta fue, dijo, unilateral, autoritaria y hasta colonialista.
En entrevista con este medio, Villena expresó que él no tiene línea política y que si bien la consulta tiene bases legales, “quedó resentida” en su legitimidad. “No tengo militancia política, nunca la he tenido, ni pienso tenerla, soy activista de los derechos humanos; no tengo nada que ver con ningún partido político (…) no puedo cancelar o entregar el mandato que me dio la Asamblea para defender los derechos humanos de todos los bolivianos”, precisó.
Político. Para Romero, “lo político” del informe defensorial le hace perder objetividad. “El informe está contaminado por un sesgo político que afecta su objetividad y se contradice a sí mismo porque reconoce los avances del Estado Plurinacional en la incorporación, promoción, defensa y ejercicio de los derechos humanos, pero denuncia una supuesta violación de esas prerrogativas constitucionales”.
Villena anunció que una comisión de la Defensoría irá al parque a recoger información de las comunidades sobre la consulta. Por su parte, el senador Adolfo Mendoza (MAS) criticó las observaciones de la defensoría al señalar que son criterios esgrimidos a destiempo, “póstumos”.