Vicepresidente ve “diplomacia improvisada” y “capitulación jurídica” chilena en caso conscriptos
El vicepresidente Álvaro García afirmó que la libertad de los tres conscriptos es una victoria de la verdad histórica boliviana sobre ese y otros temas.
El vicepresidente Álvaro García afirmó que Chile mostró una “diplomacia improvisada” en el tratamiento del caso de los tres conscriptos detenidos y que su libertad es una “capitulación jurídica” del gobierno de Sebastián Piñera ante la verdad que enarbola Bolivia no sólo en este tema, sino en todos, como la demanda marítima.
Los conscriptos Claudio Choque (20), Augusto Cárdenas (19) y José Fernández (18) se acogieron ayer a una suspensión condicional del proceso, que no implicó se declaren culpables de los delitos por los cuales fueron acusados. Llegaron ayer a territorio boliviano y fueron declarados héroes del mar porque el Gobierno considera que su detención fue una venganza ante la demanda marítima.
“Lo que se ha mostrado es una diplomacia chilena improvisada que ha roto todos los protocolos de relación entre Estados y el derecho internacional, y ha tenido que admitir. El día de ayer lo que ha sucedido en Chile es una capitulación jurídica del gobierno de chile ante la verdad histórica de Bolivia”, afirmó poco después de participar de la entrega de obras de la Estación Policial Integral (EPI) en la ciudad de El Alto.
Los tres uniformados fueron detenidos el 25 de enero cuando luchaban contra el contrabando. El gobierno boliviano en reiteradas oportunidades demandó una solución diplomática al caso y acusó a Santiago de vulnerar acuerdos bilaterales e internacionales de lucha contra el ilícito con la detención de los soldados, que fueron acusados en la vía ordinaria por delitos de ingreso a suelo chileno por paso no autorizado y con un arma de guerra.
El gobierno de Sebastián Piñera respondió que el caso estaba en manos de la justicia porque los conscriptos vulneraron normas chilenas. El lunes, los acusados se declararon inocentes y negaron aceptar una salida alternativa propuesta por la Fiscalía, pero ayer llegaron a un acuerdo y fue zanjado el caso que ahondó la difícil relación bilateral.
García afirmó que Chile trató de dañar a Bolivia e insistió en que la detención de los uniformados fue una venganza del gobierno de Piñera por el reclamo que hizo el presidente Evo Morales de una salida soberana al mar en la cumbre de La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), que tuvo como sede Santiago.
“Es un triunfo de Bolivia que tenía la verdad. Es una pequeña victoria pero muy emblemática de la verdad que siempre ha levantado Bolivia en todos los temas”, señaló.
Morales demandó ayer a su colega chileno pedir perdón a los conscriptos por lo sucedido porque sólo cumplían con su misión de luchar contra el contrabando en la frontera. El vocero del gobierno de Chile, Mauricio Lob, respondió que el gobierno de Sebastián Piñera “jamás va a pedir perdón por hacer respetar la ley”.