Icono del sitio La Razón

Embajador de Bolivia en Brasil dice que el caso Pinto tendrá solución política y no jurídica

El embajador de Bolivia en Brasil, Jerjes Justiniano, informó hoy que el caso del senador de Convergencia Nacional, Roger Pinto, que será analizado por una comisión de las cancillerías de ambos países tendría una solución política y no jurídica.

El diplomático no supo dar la fecha del inicio de reuniones, ni quienes confirmarían la Comisión Binacional para analizar el caso del senador opositor. Dijo que este es un tema que es coordinado directamente por ambas cancillerías quienes fijaran un cronograma de trabajo.

«Tiene connotaciones políticas, no tiene que ver nada jurídicamente, es una connotación política y la solución va a ser política. Por eso es que se ha nombrado una comisión porque tiene que ser política, el señor senador podía irse caminando, el vive en Cobija, podría cruzar la frontera caminando al Brasil, pero el vino aquí a asilarse porque es un acto político», manifestó Justiniano en rueda de prensa en inmediaciones de plaza Murillo. 

Consultado por si la llegada de la presidenta Dilma Roussef para la inauguración de la carretera bioceánica dependería de que se solucione primero el caso del senador Pinto, el diplomático respondió: «no especulemos las relaciones entre Brasil y Bolivia son excelentes y prueba de ello es que el Canciller ha venido a revisar la agenda», señaló.

Tras sostener una reunión el pasado fin de semana entre el canciller David Choquehuanca y su homólogo de Brasil Antonio Patriota sobre temas bilaterales, se acordó formar una comisión que analice la situación del senador de Convergencia Nacional Roger Pinto, que espera desde hace nueve meses y seis días el salvoconducto para trasladarse al vecino país que le otorgó asilo político.

El senador opositor permanece en la sede de la Embajada brasileña en La Paz desde el 28 de mayo en espera del salvoconducto que le permita viajar hasta el Brasil para gozar de su asilo político otorgado en junio por el gobierno de Dilma Roussef.