Cae una red de narcos en operativo con España
Droga. Policías detuvieron en total a 23 personas
La Guardia Civil española, en colaboración con la Policía Boliviana, detuvo a 23 traficantes de cocaína que enviaban la droga desde Bolivia hacia España mediante personas que la transportaban dentro de su cuerpo, según anunció ayer la Guardia Civil.
En la operación, realizada gracias a la pionera colaboración entre ambos cuerpos policiales, se detuvieron a todos los integrantes de la red: cinco españoles, un marroquí, un eslovaco, un colombiano y 15 bolivianos, tres de ellos cabecillas de la organización detenidos en Santa Cruz de la Sierra.
La investigación se saldó también con el decomiso de 10 kilos de cocaína de elevada pureza, 18 kilos de marihuana y 15 mil euros en efectivo, así como pistolas, teléfonos móviles y siete vehículos. Se trataba de “una organización internacional dedicada al tráfico de cocaína con una elevada fluidez entre España y Bolivia”, afirmó la Guardia Civil en Madrid a través de un comunicado.
Los agentes españoles empezaron a investigar la red por la muerte en febrero de 2012 en Bolivia de un español que transportaba droga para ellos, a quien se le rompieron dos envases de cocaína dentro del cuerpo.
Captura. Las pesquisas condujeron a la detención de cuatro personas en Madrid que transportaban medio kilo de cocaína de gran pureza y dos más en el aeropuerto de la capital que intentaban introducir droga en sus cuerpos.
La desarticulación de la red en España se culminó con una operación en Alicante y Murcia, donde se detuvieron a 14 personas y se desmantelaron “dos laboratorios clandestinos para recibir, manipular y adulterar grandes cantidades de cocaína de gran pureza”.
Un grupo de policías españoles desplazados a Bolivia en colaboración con la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) permitió la detención de los tres cabecillas de la red en Santa Cruz de la Sierra, donde se intervinieron un chalet de lujo y un centro de spa.
El dirigente del grupo, de 53 años y de iniciales J.M.M.N, contaba con dos identidades ficticias y “estuvo viviendo varios años en España, donde inició y conformó la estructura de la red en el país para poder gestionarla desde Bolivia”.
A los detenidos, de entre 18 y 53 años, se les imputan delitos de pertenencia a organización criminal y tráfico de drogas, mientras que el líder del grupo también afronta delitos de homicidio, por la muerte del joven español en Bolivia, y falsificación de documentos.