Iglesia insta al diálogo en diferendo marítimo entre Bolivia y Chile
El diálogo "es, por ejemplo, la actitud que debe estar a la base de la búsqueda de soluciones a nuestro enclaustramiento marítimo, que resume el anhelo de todos los bolivianos, que ven en esta demanda histórica una justa aspiración", señaló monseñor Oscar Aparicio.
La Iglesia católica abogó este jueves en favor del diálogo entre Bolivia y Chile y pidió «soluciones razonables» tras la decisión del presidente Evo Morales de llevar a Santiago ante el tribunal de La Haya por el centenario reclamo de una salida soberana al mar.
«Nunca debemos ir por el camino de la discordia y el enfrentamiento, debemos ser siempre personas de diálogo que busquen soluciones razonables», planteó monseñor Oscar Aparicio, presidente de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), en la apertura una asamblea de obispos en la ciudad de Cochabamba (centro).
El diálogo «es, por ejemplo, la actitud que debe estar a la base de la búsqueda de soluciones a nuestro enclaustramiento marítimo, que resume el anhelo de todos los bolivianos, que ven en esta demanda histórica una justa aspiración», señaló monseñor Oscar Aparicio.
Esta es la primera vez que la jerarquía eclesiástica boliviana, crítica de Morales, se pronuncia acerca de los constantes roces entre La Paz y Santiago, a causa del diferendo marítimo que separa a ambos países hace más de un siglo.
Morales anunció el martes que Bolivia presentará este mes una demanda contra Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya para lograr una salida al mar.
Bolivia perdió toda su costa pacífica de 400 km y 120.000 km2 de territorio en una guerra en 1879 frente a Chile, y desde hace un siglo reclama una salida soberana al mar que Santiago rechaza, afirmando que ambos países firmaron en 1904 el Tratado de Paz y Amistad que definió los límites fronterizos bilaterales.
En los últimos meses, las relaciones bilaterales han sido tirantes, luego de que Morales llevara su reclamo a foros internacionales como la Organización de Estados Americanos (OEA), la Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) y la ONU.
La tensión llegó a su punto más alto entre enero y febrero, por la detención de tres soldados bolivianos en territorio chileno que no se percataron de haber cruzado la frontera, cuando perseguían a contrabandistas. Tras días de complicada relación, Chile liberó a los tres militares, quienes fueron recibidos en Bolivia como héroes.
Chile ha reiterado en las últimas semanas que defenderá su soberanía ante cualquier instancia jurídica.