El expresidente de YPFB, Santos Ramírez, sufrió parálisis facial
El exhombre fuerte del MAS, expresidente del Senado y de la estatal YPFB, condenado a doce años de prisión, exhortó al presidente Evo Morales a que se "humanice" y pueda intervenir en su proceso y se le pueda otorgar detención domiciliaría para evitar complicaciones en su salud.
El exhombre fuerte del Movimiento Al Socialismo (MAS), expresidente del Senado y de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales de Bolivia (YPFB), Santos Ramírez, sufrió parálisis facial del lado izquierdo el fin de semana en el penal de San Pedro de La Paz, donde cumple una sentencia de doce años por el caso Catler (2009). La exautoridad fue trasladada hasta la clínica Santa Teresa donde recibe atención médica.
«Tengo parálisis facial de lado izquierdo, no puedo tener dominio sobre mis ojos ni sobre mis labios o sea no puedo hacer un silbido, no hay fuerza, entonces el primer diagnóstico era hipertensión arterial, pero ya el médico que me vio en el penal y me dijo que no es riesgoso», relató Ramírez a la red UNO al medio día de hoy.
Según el expresidente de YPFB, las causas para la parálisis podrían deberse a que hace tiempo atrás recibía un tratamiento de mal chagas, sin tomar en cuenta las consecuencias futuras. Dijo, además, que el problema se le presentó cuando dictaba una clase de Derecho a internos del penal, que se le paralizó la boca y el ojo izquierdo; que no pudo pronunciar palabra alguna y que la vista se le nubló.
Los médicos también le dijeron que este problema en su salud podría empeorar si no recibe un tratamiento adecuado, ocasionándole una parálisis mayor en sus miembros superiores o inferiores, explicó el expresidente de la Cámara de Senadores. «Le pido a Dios que no ocurra, porque eso en realidad me tendría en una situación más difícil para mí y mi familia», lamentó.
Ramírez exhortó al presidente Evo Morales a que se «humanice» y pueda intervenir -dijo- en su proceso judicial para que se le otorgue detención domiciliaría y así evitar mayores complicaciones en su salud.
«Que el presidente (Evo Morales) sea humano y no me digan que (mi caso) está en manos de la justicia, el poder político ha hecho que actúe la justicia en el caso de Santos Ramírez y eso está muy claro», acotó. Ramírez permanecerá en la Clínica Santa Teresa con custodió policial, según confirmaron autoridades del penal de San Pedro.
El expresidente de YPFB se encuentra encarcelado desde febrero de 2009 cuando salió a la luz pública un negociado entre la estatal petrolera y el consorcio Catler-Uniservice para la construcción de la planta separadora de líquidos en Río Grande, Santa Cruz, luego de la muerte y atraco del empresario Jorge O’Connor en La Paz.
Según las investigaciones, el dinero atracado (450 mil dólares), que tenía en su posesión O’Connor, era parte de una «coima» para Ramírez, porque supuestamente favoreció la contratación de la empresa Catler pese a que no tenía experiencia para montar instalaciones petroleras como la planta separadora de líquidos.
La irregular del proceso y el contrato suscrito con Catler Uniservice habría generado un daño económico al Estado de 16,6 millones de dólares.