Portugal le ofreció disculpas a Bolivia
Diplomacia. Gobierno luso admitió que Evo puede tener motivos para ofenderse
El Gobierno portugués pidió disculpas ayer de forma oficial al presidente de Bolivia, Evo Morales, por no autorizar el aterrizaje de su avión en suelo luso el 2 de julio, y admitió que el Ejecutivo andino puede tener “motivos” para sentirse ofendido.
En un comunicado, el Ministerio de Exteriores luso informó de la conversación que mantuvieron el martes su titular, Paulo Portas, y su homólogo boliviano, David Choquehuanca, con el objetivo de “contribuir a superar la tensión entre los países del Mercosur y los miembros de la Unión Europea”.
Según estas mismas fuentes, Portas reconoció que Evo Morales “puede tener motivos de queja con relación a la situación creada en el espacio aéreo europeo durante su viaje de Moscú a La Paz”, cuando Francia, Italia y Portugal le negaron permiso de tomar tierra y repostar.
El Ejecutivo luso, a través de su Ministro de Exteriores, precisó ante Choquehuanca la “singularidad” de la posición de Portugal, que autorizó en todo momento al avión presidencial “sobrevolar” su espacio aéreo, informó anticipadamente a las autoridades de sus decisiones y “no exigió ningún tipo de garantía sobre la composición de la comitiva” que acompañaba al Jefe del Estado.
Impasse. Bolivia acusó además a España de condicionar la concesión de los permisos necesarios al derecho de inspeccionar el avión del mandatario Morales. Portugal alegó “razones técnicas” para no permitir el aterrizaje, aunque las autoridades bolivianas denunciaron que su negativa y la del resto de los países europeos se debió a rumores que indicaban que el exanalista de la CIA Edward Snowden se hallaba en la nave presidencial.
Snowden es perseguido por las autoridades de Estados Unidos tras revelar una masiva red de espionaje y se encuentra aún en el aeropuerto moscovita de Sheremétievo, a la espera de un permiso de asilo temporal que le permita circular libremente por Rusia.