En conferencia de prensa, ayer el presidente Evo Morales confirmó las reuniones que sostendrá con las presidentas de Argentina, Cristina Fernández, y de Brasil, Dilma Rousseff. Con la primera será el 15 de octubre; con la segunda aún no hay fecha.
En Cochabamba, al informar de su reciente reunión con el presidente de Ecuador, Rafael Correa, el Mandatario destacó que en las reuniones con las jefas de Estado, al igual que con el acuatoriano, los encuentros sobre todo serán “reuniones de trabajo” y no meras visitas protocolares.
“Es otra reunión de trabajo (la que viene con la Presidenta argentina). Las reuniones oficiales más son protocolares, vamos a cambiar totalmente eso. Ya no van a ser reuniones oficiales, porque en reuniones oficiales más se pierde el tiempo en actos protocolares”, reflexionó el Mandatario.
Según el embajador de Argentina en Bolivia, Ariel Basteiro, la reunión entre Morales y Fernández será el 15 de octubre. Tres días antes, el 12, el vicepresidente Álvaro García Linera también visitará Argentina, pero esta vez en ocasión de la entrada folklórica que cada año lleva a cabo en Buenos Aires (la capital) la comunidad boliviana.
Según declaraciones del embajador de Bolivia en Argentina, Liborio Flores Enríquez, al portal www.infodiez.com, el Mandatario boliviano participará de un acto en la Universidad Nacional de Avellaneda, donde, además, recibirá el título de Doctor Honoris Causa de cuatro universidades: la de Neuquén, la de Córdoba, la de Abuelas Plaza de Mayo y de la Universidad Nacional de Avellaneda.
La última vez que los presidentes Fernández y Morales se reunieron fue en Cochabamba, el 4 de julio, cuando la Mandataria asistió al acto de solidaridad con Evo Morales, que días antes había sido retenido en Europa a causa de que cuatro países (España, Italia, Portugal y Francia) le prohibieron sobrevolar su espacio aéreo, bajo la sospecha de que en el avión presidencial boliviano se encontraba el excontratista de la CIA Edward Sonwden.
Con respecto a Brasil, Morales aclaró que fue la mandataria Rousseff quien le pidió reunirse en su país: “Por problema de tiempo no estamos pudiendo visitar; la compañera Dilma (Rousseff) nos ha pedido visitar Brasilia para trabajar todo el día con nuestros equipos de trabajo”, afirmó.