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En el Chapare destacan el control social porque erradicó la violencia

El Gobierno y los cocaleros del Chapare destacaron la vigencia del control social en la erradicación de coca en esa región, desde 2008, ya que con ello se evitaron enfrentamientos con fuerzas del orden que en 25 años, antes de 2006, causaron 119 muertes.

“Desde que se implementó el control social vivimos en paz, la erradicación es concertada y la lleva con respeto a los derechos humanos. Los compañeros a cargo concientizan a los afiliados para que no tengan más de un cato (de coca)”, afirmó Eliseo Zeballos, dirigente cocalero de la Federación Yungas Chapare, afiliada a las Seis Federaciones del Trópico.

De esa manera hizo un contraste con lo que pasó el 19 de octubre en el municipio de Apolo (norte de La Paz), donde en medio de un conflicto armado fallecieron cuatro integrantes de la Fuerza de Tarea Conjunta, a consecuencia de impactos de bala. Zeballos recordó que antes de la vigencia del control social en el trópico cochabambino vivieron en “guerra” constante con los erradicadores, ya que en 25 años anteriores hubo 513 heridos y 4.000 cocaleros detenidos por las fuerzas del orden en enfrentamientos.

Sistema. Zeballos explicó que en cada central, sindicato y federación cocalera existe un responsable de control social, que se ocupa de controlar que no haya cultivos excedentarios. Además concientiza a los afiliados para que no excedan el cato de coca (40×40 metros). “Si el dueño (del cultivo) está de acuerdo, él saca la coca; si no lo reconoce y se altera, (la erradicación) lo hace la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC). O sea cuando hay resistencia, el infractor se somete a la decisión de las mayorías que también ayudan a erradicar los cocales”, explicó.

El viceministro de Defensa Social, Felipe Cáceres, destacó que el control social facilita la labor de la FTC. “El trabajo se realiza en acuerdo con la dirigencia y por eso se erradica más coca en el trópico”.

Cáceres detalló que en el trópico se cuenta con diez campamentos móviles de la FTC, a diferencia de los Yungas de La Paz, donde trabajan seis. “Son por lo menos 1.000 efectivos que van de una comunidad a otra, hacen rastrillaje y control”, manifestó. Resaltó la labor del grupo “Surazo”. Esta unidad realiza rastrillajes constantes en la zona. Hay uniformados que marcan el excedente de coca en los catos y convocan al “Surazo” para que ingrese al lugar, erradique la coca y salga de la zona. Esta tropa opera cuando no se alerta de cocales excedentes o los productores no quieren la eliminación de sus cultivos ilegales. “Hay dirigentes que denuncian, si no lo hacen el (grupo) ‘Surazo’ aparece y sin reclamo alguno elimina los cocales”, afirmó.

El Gobierno espera que en los próximos tres años se consolide el control social en los cocales, un sistema que viene acompañado por el “registro catastro” que, de acuerdo con lo establecido en el artículo 17 de la Ley 1008, establece la legalidad del trabajo en cocales.

El control social obligó, según Zeballos, a algunos cocaleros a incursionar en otras áreas de producción, aunque también hizo que aparezcan nuevos “cocacultores” porque no hay fuerte control, sus afiliados van a parques nacionales para cultivar ilegalmente.

De acuerdo con Cáceres, hace dos semanas la FTC ingresó al Parque Nacional Carrasco, donde en 2012 hubo amagos de enfrentamiento y resistencia de los campesinos de Seque Rancho y Maravillas, en Cocapata, provincia Ayopaya. El miércoles detuvieron a dos cocaleros que portaban tres armas de fuego y que dispararon una vez. Los detenidos dijeron que cazaban.

En 2013 ya se erradicó 9.490 ha

Cantidad

En lo que va  del año, hasta el 30 de octubre, la Fuerza de Tarea Conjunta (compuesta por policías y militares) erradicó en el país 9.490 hectáreas de coca excedentaria, según el reporte oficial del viceministro de Defensa Social, Felipe Cáceres.

Zonas

Del total de coca eliminada, 6.287 hectá-reas corresponden al trópico cochabambino, 2.722 a Yungas de La Paz y 480 al sector de Yapacaní, en el departamento de Santa Cruz.

Droga

El reporte de interdicción también da cuenta de que se decomisó 89,96 toneladas de droga, de las que  16,62 son cocaína y 73,34 marihuana.