Comando de la Armada también autorizó viaje del buque TNR-12
Sanción. El Gobierno pide imparcialidad y objetividad en la pesquisa del naufragio
El Comando de la Armada Boliviana también autorizó la travesía del buque remolcador TNR-12 que naufragó el martes en la hidrovía Paraguay-Paraná, en el que murieron dos personas. El Gobierno pide una investigación imparcial y objetiva del caso.
El naufragio segó la vida de la periodista Liliam Ortega y del subrigadier Jesús Quispe, cuyos cuerpos fueron encontrados tras 24 horas de búsqueda, el martes, en sus camarotes. La nave siniestrada formaba parte de las cinco utilizadas para una travesía de instrucción de la Escuela Naval Militar entre Puerto Quijarro (Bolivia) y Asunción (Paraguay).
Una fuente de la Armada explicó que el plan operativo de viaje del buque era de conocimiento de los altos mandos de esta fuerza, ya que, en primera instancia, este trabajo de instrucción fue aprobado por el Director de la Escuela Naval Militar y luego enviado a sus superiores, hasta llegar al comandante de la fuerza.
Irregular. Esta fuente aseguró que este procedimiento es el conducto regular y normal que siempre se sigue para realizar cualquier tipo de operaciones castrenses, más si es una travesía en la que se saldrá del país y se utilizarán equipos y tripulación militar.
Las autoridades castrenses aseguran que solo darán a conocer las causas del accidente luego de que terminen las investigaciones, las mismas que están a cargo de un juez sumariante. También indicaron que en un plazo de diez días deberá elevarse el respectivo informe, aunque existe la posibilidad de que se pida prórroga.
El ministro de Defensa, Rubén Saavedra, exigió a los jefes militares de la Armada que el investigador del naufragio de la embarcación TNR-12 haga el trabajo pericial de manera imparcial.
“Hemos pedido a la Armada Boliviana que quien sea designado como el juez sumariante (en la investigación), debe garantizar independencia, imparcialidad y objetividad en la indagación para conocer las verdaderas causas por las cuales naufragó la embarcación boliviana el martes en la mañana”, sostuvo Saavedra.
La autoridad gubernamental adelantó que tras las pesquisas surgirán responsabilidades, por un lado administrativas y posiblemente penales, porque la consecuencia fue la muerte de dos personas. “Estamos atentos para conocer el informe del sumariante y a partir de ello asumir acciones como Ministerio de Defensa”, añadió la autoridad.
Fuentes consultadas por este diario identificaron dos irregularidades que pudieron causar el accidente. La primera, que el accidente en el que murieron dos personas se debió a que la chata remolcada, en la que se llevaba combustible, se hundió y jaló al buque TNR-12 hasta volcarlo.
También indicaron que el buque remolcador tenía sobrecarga, pues su capacidad es de seis tripulantes a un máximo de diez, pero durante el accidente llevaba a 27 personas. Además observaron que no tenía radios de comunicación para pedir auxilio, ya que se pidió ayuda tres horas después del naufragio en territorio brasileño.
El presidente de la Comisión de Seguridad del Estado Fuerzas Armadas y Policía de la Cámara de Senadores, Fidel Surco, informó que tras el hecho ocurrido solicitó los informes correspondientes a la Armada Boliviana y los responsables que estaban a cargo de la travesía. Asimismo, remarcó que esta fuerza no tiene que pedir autorización a la Asamblea para realizar viajes.
El miércoles, el comandante de la Fuerza Naval, vicealmirante Gonzalo Alcón, indicó que una de las hipótesis del accidente es que el oleaje producido por una embarcación y el viento causaron el naufragio. No obstante una fuente castrense la descartó, ya que a las 08.00 las aguas están calmadas.