Con divisiones internas y algunas victorias, el MNR celebra 63 años de la revolución nacional
Eduardo Siles, exdiputado y dirigente del MNR, sostuvo que el Movimiento ingresó en una etapa preocupante, donde las pugnas internas por las jefaturas y los "serios" problemas de liderazgo de sus actuales dirigentes han provocado el "fracaso" del MNR en las elecciones subnacionales.
Este 9 de abril se cumplirán 63 años de la Revolución Nacional impulsada por el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) y que permitió la instauración del voto universal, la reforma agraria, la nacionalización de las minas y otros cambios estructurales.
Si bien el aniversario del MNR se celebra cada 7 de junio desde 1942, la militancia del partido toma el 9 de abril de 1952 como su día de festejo. El Movimiento recibe esta fecha con divisiones y pequeñas victorias en los pasados comicios subnacionales.
El partido celebrará los 63 años de la revolución a través de una misa en la catedral de La Paz.
Eduardo Siles, exdiputado y dirigente del MNR, sostuvo que el Movimiento ingresó en una etapa preocupante, donde las pugnas internas por las jefaturas y los «serios» problemas de liderazgo de sus actuales dirigentes han provocado el «fracaso» del MNR en las elecciones subnacionales.
«Las divisiones, las peleas internas, las pugnas entre caudillitos y jefecitos locales nos han pasado factura a la presencia del partido en su conjunto y obviamente está el contexto general y poco favorable a la actividad democrática, porque de parte del Gobierno existe una actitud hostil a toda expresión democrática», señaló Siles en una entrevista con la ANF.
Los problemas tienen su origen en 2003, año de la bullada salida del líder y expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada tras la denominada Guerra del Gas, que levantó al pueblo alteño en contra de la exportación del gas a Estados Unidos a través de puertos chilenos.
Desde esos años, el MNR perdió terreno y presencia política. A más de 11 años del incidente, el partido se presentó a través de alianzas en las elecciones de octubre pasado. También el resquebrajamiento del partido estuvo presente: por un lado, el MNR encabezado por Erick Morón, de Santa Cruz decidió apoyar la candidatura presidencial de Samuel Doria Medina, partido que le permitió ser diputado electo.
En tanto, otra fracción, encabezada por el también proclamado jefe nacional del MNR, Johnny Torres, de Tarija, decidió apoyar a Jorge Quiroga del PDC. Actualmente, ambos se disputan el liderazgo del partido en una batalla legal que llegó hasta el Tribunal Constitucional.
Pese a los conflictos internos, el MNR apostó por participar en la contienda de marzo pasado, en los que logró triunfar en 11 municipios, siete de Beni y cuatro de Santa Cruz. No obstante, también hubo conflictos y el MNR no pudo participar en los nueve departamentos, según Siles, por problemas ocasionados por Morón. Con 11 alcaldías, el MNR es la cuarta fuerza a nivel nacional.
Siles dijo que Morón «no asegura un futuro provisorio» para el partido, tras utilizar a UD para llegar a la Cámara de Diputados y posteriormente declararse como diputado del MNR.
La ANF intentó entrevistar a Erick Morón para conocer su versión sobre la actual situación del MNR, no obstante el diputado no se encontraba en su oficina en La Paz ni tampoco contestó su celular.
La apuesta por un MNR de izquierda
Los resultados en las elecciones subnacionales son alentadores según considera el exlegislador del partido Guillermo Richter de Beni, aunque considera que la situación es complicada, porque día tras día se pierde el concepto del «nacionalismo revolucionario» en los remozados y jóvenes líderes del partido.
«No hay una renovación cualitativa de cuadros, la actual dirección del partido se ha olvidado de la necesidad de estructurar un partido orgánico. La organización del partido deja mucho que desear», manifestó a la ANF el también exministro de Comunicación.
Ambos militantes del MNR vaticinan un futuro «incierto» y «difícil» para el partido si no cambian ideas y cuadros políticos. En especial, Richter apuesta por consolidar al MNR como una fuerza de izquierda nacional que fortalezca su presencia en las regiones y que permita la elección de sus dirigentes mediante el voto universal.
La única salvación para el MNR es definitivamente consolidar una posición de izquierda nacional absolutamente clara, hay que retomar el camino de la revolución de 1952 en un contexto político lógicamente distinto», sostuvo Richter, quien, sin embargo, ve esto como improbable por la tendencia conservadora de la actual dirigencia.
Hoy por hoy el MNR es el único partido de larga data que está vigente. Partidos «tradicionales» como ADN o el MIR se desbarataron.
