El Gobierno destinará al menos 220 millones de dólares a la compra de 16 radares de uso civil y militar y evalúa la adquisición de unos 40 mil fusiles para renovar el material bélico en las Fuerzas Armadas, aunque aún no hay un presupuesto definido existen propuestas de venta de industrias como de Francia, China, Brasil, Argentina y Rusa, informó el ministro de Defensa, Reymi Ferreira.
Una de las prioridades es la adquisición de radares, por lo que el presidente Evo Morales estará en mayo en Francia, precisamente, para concretar la compra de 16 radares, de los que uno llegará a 10 meses de firmado el contrato para labores como la lucha contra el tráfico aéreo de drogas. Como parte complementaria está prevista la compra de aeronaves.
Ferreira aseguró en una conferencia de prensa que Morales instruyó al Ministerio y al Alto Mando de las Fuerzas Armadas modernizar el material bélico, aunque tomando en cuenta las prioridades y la disponibilidad de recursos económicos. “Nosotros tenemos el deber de hacerlo (renovación) en el marco de la austeridad y también priorizando”, insistió.
El comandante de la Fuerzas Aérea Boliviana, general Gonzalo Durán, también participó de la conferencia de prensa y explicó que el sistema de radarización deberá estar acompañado por un plan integral que implica la adquisición de aeronaves para el derribo de aviones en vuelos ilegales como en casos de narcotráfico, ilícita actividad que utiliza avionetas.
La renovación de armamento beneficiará a las tres fuerzas, Ejército, Fuerza Aérea Boliviana y Armada Boliviana. “Ahí pensamos 30 mil (fusiles) para la instrucción y la defensa y 10 (mil) para la reserva”, explicó y también anunció que son requeridos al menos 20 aviones destinados a entrenamiento militar.
Empresas de Francia, China, Brasil y Argentina presentaron ofertas, como de Colombia y Perú en materia de armada. “Esas son propuesta solamente, no hay nada definido”, aseguró y reiteró, sin embargo, que es necesaria la renovación del material bélico.
“(Bolivia) tampoco puede descuidar a sus Fuerzas Armadas que son las que menos inversión militar han hecho en América Latina”, señaló.