Después de al menos 353 días de detención preventiva en una carceleta de la Policía Militar (PM), el suboficial de Ejército Jhonny Gil obtuvo ayer detención domiciliaria, debido a una resolución emitida por la Sala de Apelaciones y Consultas del Tribunal Supremo de Justicia Militar de La Paz.
Gil estuvo detenido por haber participado en una inédita movilización de los efectivos de baja graduación de las Fuerzas Armadas (FFAA), entre marzo y abril de 2014. Por ello también fueron aprehendidos dos miembros de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB), los suboficiales Franklin Colque y Freddy Sucojayo, quienes aún siguen privados de libertad en una celda militar de El Alto desde julio de 2014.
“Nos han notificado con la Resolución 03/2015, que entró en vigencia (ayer), en la que se dispone la detención domiciliaria para el suboficial Jhonny Gil”, informó a este diario su abogado Oswaldo Rojas.
Explicó que el uniformado tiene que cumplir diferentes requisitos para que sea trasladado a su domicilio, como el arraigo, el pago de una fianza de Bs 20.000 y presentar dos garantes personales. Estos trámites no pudieron ser realizados ayer y se prevé concluirlos este lunes.
Rojas explicó que a pesar de esta decisión, que pone en libertad a Gil, el proceso por amotinamiento en contra del suboficial continuará en estrados judiciales militares, ya que el Tribunal de Justicia trabaja normalmente.