“Mar para Bolivia, mar para Bolivia…” fue el estribillo recurrente de decenas de personas que se dieron cita en la plaza Pedro Domingo Murillo tras concluir, a las 10.30 de ayer, la segunda ronda de alegatos de la delegación boliviana en la Corte Internacional de Justicia situada en La Haya.
“Estoy acá para pedir a Chile que nos devuelva el mar que nos quitó”, dijo Alexandra de siete años, quien cursa 2° de primaria en la escuela Sagrado Corazón de Jesús.
Al igual que ella, 30 de sus compañeros cantaban a unísono. “Yo quiero un mar/Un mar azul para Bolivia…”. Los niños posaron para los fotógrafos y para las cámaras de televisión de los canales de televisión nacionales y de Chile. Cuando concluyó el acto, se fueron marchando.
Después llegó un escuadrón de escolares de la Unidad Educativa Héroes del Pacífico, coreando “Mar para Bolivia”. Con su indumentaria particular de marineros se robaron la atención de los periodistas que estuvieron desde las 08.30, en la plaza Murillo, para captar las impresiones de la ciudadanía en esta histórica jornada.
“Mi deseo es volver a las costas, bañarme y volar sobre el mar boliviano”, manifestó emocionado Felipe Mendoza, quien hace 11 años se viste de cóndor boliviano.
David Ramírez de 35 años, que vive en Santa Rosa de Lima de la ciudad de El Alto, llegó al lugar con la tricolor en las manos. Y tras concluir los alegatos indicó: “Tengo la esperanza de poder salir al mar. Después de esta exposición creo que estamos muy cerca”.
“Ojalá de acá a un tiempo estemos bañándonos en nuestro mar”, anheló Nicasio Condori de 71 años, oriundo de Huarina-La Paz. Llegó a la ciudad a las 05.00 para escuchar la exposición de alegatos de la delegación boliviana y, emocionado, a punto de dejar caer una lágrima, dijo: “Estoy seguro de que la Corte Internacional de Justicia se va a declarar competente y va a dar una solución favorable para nuestro país”.
María Quispe y Nicolás Condori llegaron desde Betanzos-Potosí para “apoyar y pedir a la Pachamama que los chilenos nos devuelvan el territorio que nos arrebataron”. Ambos pusieron la tricolor y la bandera de la reivindicación marítima entre un puñado de coca, robándose la atención de los medios de comunicación. En Oruro, delegaciones estudiantiles y militares marcharon con la tricolor nacional, hasta la avenida Cívica, donde al unísono interpretaron el Himno Nacional, la Marcha Naval y la cueca Viva mi Patria Bolivia.