La fuerza antidrogas decomisó más de 2,5 toneladas de marihuana paraguaya que era trasladada en un carro blindado y una camioneta a Chile. En el operativo, realizado en Tiraque, aprehendieron a cinco personas, dos de ellas con antecedentes por el mismo delito.
“Estamos hablando de dos toneladas y media que eran trasladadas por diferentes rutas a territorio boliviano, pasando por Ibibobo, Villamontes, Abapó hasta Santa Cruz y de ahí por la ruta antigua a Cochabamba para llevar la mercadería hasta Chile”, informó el ministro de Gobierno, Carlos Romero.
La marihuana estaba envuelta en 2.787 paquetes, que dieron un peso total de 2.530 kilos. Era transportada en dos vehículos, un camión Bucher Duro con placa 1847-HRE y una camioneta Toyota Lucida. La hierba prensada, tipo ladrillo, estaba apilada en el interior de los motorizados, no estaba camuflada, detalló Romero.
De llegar a Chile, la droga habría sido comercializada en más de Bs 9 millones, unos $us 1,5 millones, si se considera que el kilo vale cerca de $us 700. “El precio varía en Chile, pero tiene mayor cotización que en otros países de la región”, añadió la autoridad.
Un trabajo de Inteligencia y seguimiento de seis meses a una organización criminal permitió el operativo de decomiso de la marihuana, considerado uno de los más grandes en lo que va del año.
Según el subdirector de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN), coronel Marco Álvarez, la droga de color achocolatado, característica de la hoja de Paraguay, fue acopiada en Santa Cruz, departamento que no es la única zona para este fin, ya que en otros operativos se descubrieron cargamentos recolectados en Uyuni y Palos Blancos, también procedentes del vecino país.
En este caso, los choferes esquivaron controles policiales existentes en la carretera antigua y buscaron rutas alternas, pero la labor de seguimiento permitió interceptarlos en el cruce Tiraque, dijo Álvarez. Explicó que la ruta de la marihuana es diversa desde Paraguay hacia Chile, considerando la rentabilidad de la hierba.
Romero aseveró que el control en frontera cuenta con 28 puestos de control migratorio, además de trancas móviles, pero que éstos “son insuficientes” ya que el flujo de droga no se da solo por tierra.