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Boletas de la consulta, con seguridad de tipo forense

Las boletas de sufragio para el referéndum constitucional tienen tres candados de seguridad. Uno de ellos, el microtexto, es susceptible de un análisis forense que solo peritos en investigación documental efectuarán si se evidencia una eventual falsificación del documento.

El vicepresidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Antonio Costas, explicó a La Razón que se tomaron estas previsiones en caso de “alguna controversia” que surja con respecto a la validez del documento electoral que “tiene un nivel de seguridad forense”.

La autoridad precisó que las medidas de seguridad que asumió el TSE para las papeletas de la consulta de la reforma constitucional “van a poder garantizar que no se falsifiquen estos documentos importantes que permiten que el ciudadano emita su voto” el 21 de febrero en territorio nacional y en 33 países del exterior.

Costas explicó que los microtextos corresponden al tercer nivel de seguridad, el más riguroso de la boleta, y estarán ubicados de tal forma que solo un experto en investigación documental será capaz de analizar. “Hay que utilizar a veces microscopio porque no se puede verificar con medios que no sean los adecuados”, remarcó Costas. De hecho, las entidades electorales de la región utilizan este recurso para elevar el grado de seguridad en las boletas de sufragio y en el mismo proceso electoral.

CASOS. En la localidad de Ornocasa, (Chuquisaca), durante los comicios electorales de 2014, se puso en duda la autenticidad del material electoral luego de que dirigentes del opositor Partido Demócrata Cristiano (PDC) constataran que las boletas estaban previamente marcadas. Otro caso denunciado fue en las elecciones subnacionales de marzo en Beni. Los directivos del opositor Movimiento Demócrata Social (Demócratas) aseguraron que le ganaron al gobernante Movimiento Al Socialismo (MAS) en algunas poblaciones, a pesar del resultado que les fue adverso. Los opositores denunciaron que se habían cambiado las boletas de sufragio originales por otras que favorecían al oficialismo. Estos casos no prosperaron, no obstante, la oposición exteriorizó su desconfianza hacia el TSE.

En esa línea, la entidad activó, como en los pasados comicios, otros tres recursos de seguridad además de los microtextos: el grabado con la técnica del guilloché, el código QR que será escaneado con un lector láser y el uso de tinta fluorescente. Todos estos recursos serán incorporados en las boletas con tecnología moderna de impresión. Solo algunas imprentas del país cuentan con ella.

El grabado guilloché está conformado por un conjunto de líneas que generalmente son utilizadas para la impresión de billetes. Los códigos QR o código de respuesta rápida (por sus siglas en inglés Quick Response code) son módulos de puntos similares a los códigos de barra que se imprimen en los productos. “Va a tener información de seguridad, una encriptación (clave) que va a permitir a través de la visión y de la lectura verificar también si es una papeleta impresa por nosotros”, puntualizó Costas.

Tanto las líneas guilloché como los códigos QR corresponden al primer nivel de seguridad. Según Costas, los jurados electorales que se elegirán para las justas estarán capacitados para identificar estas medidas cuando reciban el material electoral.

Asimismo, el vocal explicó que la utilización de la tinta fluorescente en la impresión de algunos sectores de la boleta servirán también para “detectar si hubiera una falsificación mediante el uso de la luz ultravioleta”. Este recurso corresponde al segundo nivel en el que “eventualmente” los jurados podrán intervenir.  

La Sala Plena del TSE aprobó la papeleta de sufragio que se utilizará en el referéndum de reforma parcial a la Constitución, que plantea la repostulación de los principales mandatarios del país. El diseño de la boleta de sufragio tiene una orientación vertical y es de color gris.

El modelo considera dos carillas. En la plana principal se consigna la pregunta del plebiscito, en dos párrafos. “¿Usted está de acuerdo con la reforma del artículo 168 de la Constitución Política del Estado para que la Presidenta o Presidente y la Vicepresidenta o Vicepresidente del Estado puedan ser reelectas o reelectos por dos veces de manera continua?”. En el segundo párrafo sigue: “Por la disposición transitoria de la Ley de Reforma Parcial de la Constitución Política del Estado se considera como primera reelección al periodo 2015-2020 y la segunda reelección el 2020-2025”.

En la parte inferior se distinguen las dos alternativas de respuesta diferenciadas por colores. Como fija la Ley 026, el Sí es representado en color verde y el No con el contorno rojo.

El nuevo diseño de la boleta medirá 21 por 29,7 centímetros y se imprimirá en papel blanco de 75 gramos. Consignará el nuevo logotipo institucional del Órgano Electoral Plurinacional (OEP) que pretende marcar la nueva etapa de la entidad.

El TSE alista la convocatoria para la impresión de las boletas, no obstante, en las elecciones de 2014, la firma gráfica Sagitario se adjudicó el contrato. Aún no se tiene el costo que demanda la impresión puesto que la entidad espera concluir con el empadronamiento para definir la cantidad de boletas para la consulta.

La ley y los colores de la consulta

El artículo 139 de la Ley 026 fija que “en referéndums la papeleta de sufragio consigna la o las preguntas sometidas a consulta, así como las opciones de votación en recuadros diferenciados: La opción ‘Sí’ en color verde y la opción ‘No’ en
color rojo”.

El TSE dispone más recintos y notarios para el referéndum

Santa Cruz sumó 85 nuevos recintos, el mayor incremento del país

El Tribunal Supremo Electoral (TSE) dispuso el incremento de nuevos centros de votación y más notarios electorales con el fin de reducir los tiempos en el traslado de las actas de escrutinio de los recintos a los centros de conteo y así  apurar el cómputo final del referéndum constitucional de 2016.

La entidad alista toda la logística para la consulta del 21 de febrero. En ese sentido, la Sala Plena determinó la creación de nuevos recintos electorales en el país, principalmente en Santa Cruz. La explosión demográfica y la ausencia de vocales departamentales por cuatro años provocaron este déficit de centros de votación.

Falencia. “En el anterior proceso (subnacional de marzo), los votantes tuvieron que caminar bastantes kilómetros. Con la creación de recintos se va a mejorar este problema, pero no es suficiente”, señaló a La Razón la vocal Lucy Cruz, responsable del área del geografía electoral.

Por efecto del nuevo ajuste, el departamento cruceño contará con 85 nuevos centros de votación. En las elecciones subnacionales de marzo esta región contaba con 876 recintos electorales y para la consulta constitucional del 21 de febrero se abrirán 961.

En las demás regiones los incrementos son menores. En Potosí se crearon 17 nuevos recintos, en Cochabamba 16, en Tarija ocho y en Chuquisaca siete. Además, en La Paz se fijarán cinco nuevas escuelas o colegios para votar, en tanto que en Oruro y Beni solo cuatro. Pando es el único departamento que mantendrá sus 128 recintos asignados en los comicios subnacionales.

Otra falencia que el TSE identificó es la sobrecarga laborar de los notarios. “En el anterior proceso electoral se ha tenido inconvenientes porque los notarios han atendido hasta 20 mesas electorales, lo que no es conveniente”, recordó Cruz.

Los notarios son los encargados de transportar los sobres de seguridad que contienen las actas de escrutinio de cada mesa a los centros de cómputo departamental a la conclusión de la votación.

A mayor número de mesas, el traslado de los sobres se demora. “Significaba mucha exigencia, ahora un notario se hará cargo de 10 mesas”, explicó Cruz, quién lideró hace dos semanas un encuentro nacional del área del cual emergieron estas determinaciones.

La vocal afirmó que la principal finalidad de este tipo de decisiones es la de agilizar la emisión de resultados y, por ende, en el cómputo final. En esa misma línea, la entidad también rediseñó las rutas de transporte de actas para los notarios. “Anteriormente se ha dejado al libre albedrío. Ahora desde el TSE estamos direccionando”, dijo Cruz.

Este nuevo plan toma previsiones ante posibles contingencias, como las climatológicas. De hecho, al TSE le preocupan los riesgos de inundaciones en Beni, Pando, Santa Cruz, Cochabamba y el norte de La Paz, regiones que desde enero registrarán precipitaciones pluviales intensas.

Entidad prevé crear mapa electoral digital

El Tribunal Supremo Electoral (TSE) prevé diseñar un mapa digital parecido al Google Maps que ofrece la firma del mismo nombre. A través de una aplicación que estará disponible incluso para teléfonos móviles, el votante tendrá la posibilidad de identificar las calles y zonas de los recintos de sufragio.

“Vamos a tener una especie de Google Maps. Hemos realizado un plan piloto de levantamiento de datos georreferenciales en los recintos de Totora Marka (Oruro). Este trabajo lo vamos a realizar en todo el país una vez que concluya el referéndum en todo el país”, desveló a La Razón la vocal Lucy Cruz.

Este programa de ubicación de recintos recogerá también la información en un denominado Geodatabase del número de votantes habilitados en cada zona para facilitar el análisis de creación de nuevos recintos.

“Los nueve departamentos han solicitado GPS (sistema de posicionamiento global y localización mediante satélites) para hacer el levantamiento de datos”, dijo Cruz. Este requerimiento está consignado en el presupuesto de 2016 y permitirá conocer la distancia entre los recintos y la calidad de las vías.