El vicepresidente Álvaro García acusó al defensor del Pueblo, Rolando Villena, de ser un “político camuflado”, por lo que anunció que hasta antes de mayo, cuando concluye la gestión de la autoridad cuestionada, la Asamblea Legislativa designará a una nueva autoridad “idónea e imparcial”.
“La Asamblea va a asumir la tarea de elegir a una persona imparcial, comprometida con el país, no comprometida con un partido de manera directa, ni de manera hipócrita, como lo ha hecho el (actual) Defensor”, señaló García.
En 2010, el Legislativo, controlado por el Movimiento Al Socialismo (MAS), designó a Villena en el cargo, quien es teólogo de profesión y obispo de la Iglesia Evangélica Metodista en Bolivia. Fue presidente de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (APDHB) y crítico con el Gobierno en informes, por ejemplo, sobre la intervención a la marcha indígena de 2012.
“Vamos a elegir a una persona idónea. Lo que sí nos vamos a preocupar es que no sea un político camuflado, como fue el actual Defensor: amigo, pariente, conocido, comilitante del Movimiento Sin Miedo (MSM); sus relaciones políticas están comprobadas”, insistió García en rueda de prensa.
Al respecto, este diario buscó la versión de Villena, no obstante, desde la oficina de la Defensoría informaron que la autoridad no se manifestará sobre las declaraciones vertidas por el Vicepresidente.
En 2015, Villena cuestionó algunas de las políticas del Gobierno respecto a los derechos de los pueblos indígenas y sobre el debilitamiento de la democracia, lo que originó críticas por parte del Ejecutivo. La Asamblea calificará la capacidad profesional y los méritos de los postulantes y, tras un proceso de evaluación, se designará al Defensor con dos tercios de voto.