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En el área andina, la típica feria comercial dominical acompañó a la jornada electoral

Una jornada de feria comercial acompañó al voto por la modificación parcial a la Constitución Política del Estado (CPE), en las poblaciones del altiplano paceño, donde destacó la presencia de personas de la tercera edad.

En Achacachi amaneció nublado pero la gente se dio cita en los recintos electorales cerca de las 07.30, pese a que la apertura de las mesas estaba anunciada para las 08.00. “Tengo que ir a pastear a mis animales, por eso vengo bien temprano”, contó uno de los votantes.

En el acceso al municipio aún se podía ver paredes pintadas con ambas opciones, mensajes que no podían pasar inadvertidos para las personas que acudían desde poblaciones vecinas caminando o en bicicleta. Otros asistieron a la cita electoral arriba de algunas camionetas que no contaban con el permiso del Tribunal Electoral Departamental (TED).

En la plaza principal se llevó a cabo la feria comercial que reúne a comerciantes lugareños y también a visitantes con diversas mercaderías, desde ropa, electrodomésticos y comestibles, entre otros, que atrajeron tanto como los tres recintos electorales del pueblo, Mariscal Andrés de Santa Cruz, Colegio Omasuyos y Unidad Educativa Simón Bolívar, donde fue destacada la presencia de personas de la tercera edad.

En la Unidad Educativa Mariscal Andrés de Santa Cruz de Huarina, donde también se armó la tradicional feria, se contó con la presencia del canciller David Choquehuanca, quien emitió su voto a los cinco minutos de arribar a su mesa, pues no formó la fila correspondiente, anticipándose en el turno a 17 personas, lo que generó muestras de protesta. “¡Colador!”, le decían. Pero la protesta no llegó a mayores y Choquehuanca celebró la jornada refiriéndose a ésta como “un proceso democrático donde da gusto ver a la gente votar”.

Hubo un momento emotivo, cuando el canciller se topó con su padre, Nicolás, quien, como muchas personas de la tercera edad en Huarina, también se presentó a votar. Padre e hijo se fundieron en un cálido abrazo ante la mirada y sonrisas del resto.

En Copancara, situado entre Huarina y Batallas, llamó la atención la escasa asistencia a las mesas de sufragio. Hasta el mediodía y, según algunos jurados electorales, de los 400 votantes habría sufragado menos de la mitad.

En Batallas, de igual manera se realizó desde tempranas horas una feria, cuyos visitantes se turnaban entre emitir su voto en el Colegio Genoveva Ríos y realizar sus respectivas compras. También fue notoria la presencia de ancianos aunque, según algunos jurados, la asistencia no fue tan numerosa como en años pasados.