Morales: Si Chile abandona el Pacto de Bogotá ‘es una confesión de futuras derrotas’
El presidente Evo Morales confirmó hoy que visitará Quetena Chico, en Potosí, para demostrar que las aguas del Silala son un manantial y no un río como sostiene Chile. La presidente de Chile, Michelle Bachelet, se refirió hoy el tema y confirmó que presentarán una contrademanda de concretarse el anuncio boliviano de demandar soberanía sobre ese recurso
El presidente Evo Morales afirmó hoy que el pedido de sectores políticos chileno de retirarse del Pacto de Bogotá de concretar la demanda por las aguas manantiales del Silala “es una confesión de futuras derrotas a cualquier demanda”. La presidente Michelle Bachelet se refirió por primera vez al caso y reafirmó que contrademandarán de presentarse la causa.
“Éstos políticos piden retirarse del Pacto de Bogotá, es como confesión anticipada de que van a perder frente a nuestras demandas”, insistió en una conferencia de prensa en la que consideró que es un derecho de Chile el denunciar el Pacto de Bogotá, sin embargo, sostuvo, debe tomarse en cuenta que de hacerse se “aislará del derecho internacional”.
El Tratado Americano de Soluciones Pacíficas, más conocido como Pacto de Bogotá, fue suscrito en abril de 1948 por la mayoría de los países de América. Le otorga jurisdicción a la Corte Internacional de Justicia (CIJ), permitiéndole dirimir disputas legales entre Estados. Es en esta corte, donde radica la demanda marítima y se perfila también atienda el caso del Silala.
Entre legisladores chilenos surgieron voces de abandonar el Pacto. “Quiero exigirle a la cancillería que nos retiremos del Pacto de Bogotá”, dijo el diputado José Manuel Edwards, de Renovación Nacional (RN) e integrante de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara, según La Tercera; a quien se sumó el presidente de la Unión Demócrata Independiente (UDI), Hernán Larraín: “No podemos seguir trapeados por el ansia de hostilizar a Chile de Bolivia”.
Morales señaló que Chile se decía respetuoso del derecho internacional y cuestionó que algunos sectores de poder usen a organismos internacionales cuando les son útiles a sus intereses.
Bachelet sostuvo hoy una reunión con el canciller Heraldo Muñoz. A la conclusión del encuentro calificó de ‘poco amistoso’ la última decisión de la administración de Morales y aseguró que “durante más de 100 años Bolivia reconoció la calidad de río internacional del Silala”.
«El gobierno de Bolivia habla de diálogo, pero los hechos demuestran que no está dispuesto a ningún diálogo, y que prefiere instrumentalizar ante los tribunales internacionales. Frente a este cuadro mi gobierno va a resguardar nuestros intereses nacionales», advirtió, según publicó en su versión digital La Tercera.
Morales anunció el miércoles 23 de marzo, Día del Mar, la decisión de defender legalmente la soberanía de las aguas del Silala, que fueron desviadas hace más de 100 años por Chile sin ningún tipo de compensación. La CIJ fue perfilada como organismo al que se llevará el caso, que será el segundo tras la demanda por el mar.
“Que yo sepa no hay razón para defender sobernía de algo que es asalto, invadido, robado; y lamento mucho, algunos autoridades hacen mucho daño a su pueblo y hacen daño a sus vecinos”, afirmó Morales y confirmó su visita a la zona para demostrar, afirmó, que las aguas provienen de bofedales y no de un río.