Zapata asegura tener tres hijos y dice que se dejó ‘encandilar por posibilidades y ambiciones’
En el documento hecho público hoy, añadió: “Soy solo una mujer y madre que confió desde la adolescencia en adultos, con terribles resultados dado que siempre se aprovecharon de mí, hasta hoy ejercen presiones, aún en la situación en la que estoy y para destruir mi vida”.
Gabriela Zapata, expareja del presidente Evo Morales, aseguró ser madre de tres menores y que tuvo que protegerlos “de ambiciones y venganzas políticas”. Además se declaró víctima “por haber confiado en adultos” y aseguró se dejó “encandilar por posibilidades y ambiciones”, en un documento dirigido a la opinión pública, fechada el 1 de abril.
“Tengo tres niños mantenidos por mí. No he recibido apoyo alguno de nadie en mi vida, ni familiar ni de entidad alguna, lo que logre hacer y la vida fue para mis hijos, cuyo alimento y estabilidad siempre dependió de mí, incluso seguridad física de ellos ante las ambiciones y venganzas políticas como consecuencia de los eternos conflictos del país por lo que a raíz de ello, tuve que adoptar medidas para preservar su educación escolar”, establece parte de la misiva.
No menciona mayores detalles sobre los menores. Está en cuestión si vive el hijo con Morales, del que hasta el momento se aseguró está fuera de Bolivia y que recibió educación privada, ya que no existe su registro en el sistema educativo. El Gobierno, a través de autoridades como el ministro de Defensa, Reymi Ferreira, negó viva el menor.
En el documento hecho público hoy, añadió: “Soy solo una mujer y madre que confió desde la adolescencia en adultos, con terribles resultados dado que siempre se aprovecharon de mí, hasta hoy ejercen presiones, aún en la situación en la que estoy y para destruir mi vida”.
Aseguró no conocer al ministro de Gobierno, Carlos Romero, tras la publicación de fotografías en la que la autoridad aparece junto a personas de nacionalidad china. “No he tenido el agrado siquiera de conocer personalmente al Sr. Carlos Romero y nunca he mantenido ningún contacto con su persona en ninguna circunstancia, por lo que esgrimen las posturas políticas de oposición como de oficialismo y sus portavoces, no corresponde a la verdad (sic)”, escribió Zapata.
El 3 de febrero, el periodista Carlos Valverde denunció tráfico de influencias entre el Gobierno y la firma china a partir de la relación sentimental entre el presidente Evo Morales y Zapata, quien fue funcionara de la empresa china con contratos superiores a los $us 500 millones.
En el documento de cuatro puntos, la expareja de Morales aseguró que siempre fue sola y utilizada, más, dijo, cuando desde joven rompió esquemas sociales, en referencia a su incursión a actividades políticas en las juventudes del Movimiento Al Socialismo (MAS).
“Me deje encandilar por posibilidades y ambiciones que reitero, solo buscaban aprovecharse de mí, hasta el punto en el que me encuentro hoy, vilipendiada, presionada, amenazada, detenida en una prisión que no corresponde a mi condición de detenida preventiva”.
Zapata guarda detención preventiva en el penal de máxima seguridad para mujeres en el barrio de Miraflores de La Paz desde el 24 de marzo, luego de ser trasladada del Centro de Orientación Femenina (COF) al que ingresó el 28 de febrero por decisión judicial. La Fiscalía la imputó por al menos seis delitos, entre ellos, enriquecimiento ilícito.
La exfuncionaria de CAMC solicitó a Romero interponer sus buenos oficios para el respeto de sus derechos en su condición de Detenida Preventiva e investigar el por qué de las presiones de las internas e informes policiales, del recinto, en contra suya.
El 4 de marzo, al menos 15 internas de un total de 50 armaron una fogata con colchones en medio de una protesta exigiendo el traslado de Zapata a otro penal. Romero explicó que se trató de una reacción ante denuncias de la expareja de Morales sobre un supuesto intento de envenenamiento.