El Comando de la Policía en Cochabamba dispuso que el gobernador del penal San Pablo de Quillacollo, Limber Zurita, sea destituido y sometido a un proceso interno, porque ingirió bebidas alcohólicas con dos reclusas en un local público el fin de semana pasado, informó este martes su titular, Elvin Baptista.
«Él va a ser sometido a un proceso administrativo, aparte del penal, pero aparte ya ha sido destituido», dijo en una conferencia de prensa.
El oficial fue descubierto por efectivos de inteligencia policial cuando se emborrachaba con las reclusas el pasado sábado, cerca de las 14.30, en un local denominado ‘Las gallinas’, que está ubicado en las inmediaciones del mercado de papas del municipio de Quillacollo.
Según Baptista, el procesamiento de Zurita se hará bajo la consigna de que la Policía Boliviana no tolerará que sus efectivos estén implicados en hechos de corrupción.
«Para cualquier acto de corrupción tenemos los mecanismos adecuados para detectar esta situación», sostuvo.
El jefe policial dijo, por otro lado, que las reclusas implicadas en el caso, Daniela Becerra Villanueva y Karen Fernanda Fernández Aguilar, fueron recluidas nuevamente en el penal San Pablo con detención preventiva por el cargo de evasión.
Las dos implicadas cumplen condenas previas desde el 6 de diciembre 2006 y el 1 de septiembre de 2012 por la comisión de los delitos de asesinato y tráfico de sustancias controladas.
El ahora ex gobernador del penal San Pablo está aprehendido y comparecerá ante un juez cautelar en las próximas horas. (04-10-2016)